El hijo de un embajador preside (no era de esperar que fuera el hijo de un obrero) la primera Asociación de Amigos de la Fundación Juan Negrín que acaba de constituirse en Valencia con el propósito principal de servir de "cauce de participación y apoyo" a la Fundación Juan Negrín de Las Palmas de Gran Canaria.
Patricio de Azcárate, hijo de Pablo de Azcárate, embajador de la Segunda República en Londres durante la guerra civil y amigo personal de Juan Negrín, es el presidente honorario de la recién constituida asociación.
Félix Vidal, la periodista Rosa Brines y María Isabel Rumbo son los impulsores de esta Asociación, que incluye en sus estatutos como objetivos "la investigación, el desarrollo y la difusión del pensamiento humanista democrático y socialmente avanzado", que fue representado por Juan Negrín López, científico, político y presidente del Gobierno de la Segunda República.
Pablo de Azcárate, padre de Patricio, fue embajador de la República en Londres y amigo personal de Juan Negrín y, tras la guerra civil española, además, las dos familias fueron vecinas en Inglaterra y sus encuentros muy frecuentes,
"Negrín vivía en una casa de campo muy próxima a la nuestra, la relación era muy íntima, muchas veces comíamos juntos y nos visitábamos mucho", recordó Patricio e Azcárate, quien tiene por Juan Negrín "un recuerdo y admiración sin límites".
Agrega que Negrín sabía "tanto de poner remedio al llanto nocturno de un cachorro que habían adquirido los Azcárate -"le gustaban mucho los perros"-, como sorprendía a un estudiante entonces de ingeniería eléctrica en Londres, con tres o cuatro libros sobre su carrera", procedentes de su legendaria biblioteca.
"Negrín fue la personalidad española más importante del siglo XX", asegura el presidente honorario de la recién nacida asociación, cuya memoria llega para recordar la primera vez que oyó un bombazo en el frente del Ebro.