RAFAEL GONZÁLEZ MORERA
El Gobierno canario se ha tenido que “retratar” pagando 33 millones de euros por el lucro cesante en Montaña Rayada, y aquí paz y en el cielo gloria. Todo empezó en 1990, cuando se desclasificaron unos terrenos montañosos situados al sur del hotel “Los Gorriones”, que están en un espacio protegido, el Parque Natural de Jandía. Los terrenos figuran a nombre de la Sociedad Montaña Rayada S.L., constituida con un capital social entre 3.000 y 60.000 euros, y la sede social está en el hotel Natura Palace de Playa Blanca, Lanzarote. Cuando desclasificaron los terrenos estaba de presidente del Cabildo Insular de Fuerteventura Gerardo Mesa Noda, y en el Ayuntamiento de Pájara figuraba como concejal de Urbanismo, Carlos González Cuevas, ambos de CC/am.
Clasificar urbanísticamente terrenos no edificables era una de las aficiones apasionadas de Carlos González Cuevas. Por esa época, el exalcalde Dalmacio Mendez fue a la cárcel por decir aquello de “qué hay de lo mio”. En el proceso de todo este “affaire”, el Tribunal Superior de Justicia de Canarias falló que los propietarios debían ser indemnizados, y la cuestión se ha convertido en 33 millones de euros que ha tenido que pagar el Gobierno de Canarias. Y dos piedras.
De repente me tropiezo con unas declaraciones de hace un mes de José Manuel Soria en relación a este pago de dinero tocante y sonante, en la que afirmaba que si se tenía que pagar por el asunto/trasunto de Montaña Rayada, incluso si se tenía que pagar por el trasunto/asunto de Tebeto, todo eso no influiría sino de una forma mínima en las parcelas de Educación y Sanidad. Y dos piedras.
Entre un pufo y otro pufo, las arcas de la Comunidad Autónoma de Canarias se van vaciando, y mientras se paga por el lucro cesante todos los desaguisados y bien guisados asuntos/trasuntos, que van de montaña en montaña, de urbanización en urbanización, y de barranco en barranco, aquí siguen discutiendo algunos si Soria es un buen administrador, o simplemente es un presunto delincuente político, cuando menos. Y Paulino Rivero prometiendo 80.000 puestos de trabajo de aquí a un año y medio. Será en la montaña. Si la montaña no viene a Mahoma, Mahoma va a la montaña. A mi esto del lucro cesante me ha dado una idea, como la editorial Planeta no me ha publicado un fabuloso libro que he escrito, pienso demandarla por una cantidad no inferior a 100 millones de euros. Mi querido lector de Utiaca lo entenderá.