Franchy Roca es algo más que una calle... es alguien. Uno de los políticos canarios más destacados. Se habla poco y mal de una de sus acciones más gloriosas: su dimisión. En 1931, siendo secretario de gobierno de la Audiencia Territorial de La Coruña fue elegido diputado por Las Palmas y poco después, en julio de 1931, fue designado Fiscal General del Estado, cargo del que dimitiría años más tarde, tras aprobarse por las Cortes Constituyentes la Ley de Defensa de la República. Esta era una ley que con la idea de "defender la República" realmente limitaba y combatía libertades importantes como la libertad de expresión. Más de un hombre honrado fue procesado y encarcelado por esta ley. Es más que razonable que dimitiera.
Acierta el profesor de Historia del Pensamiento Político, Agustín Millares, cuando dice que´Franchy Roca se arruinó por la política´; y no dice toda la verdad cuando dice sin explicaciones que "dimite por motivos ideológicos".