Carlos Inza Lanzarote
Sanidad ha puesto la soga al cuello a Mbarka Alina Hafdi. A esta mujer saharaui, residente hace cinco años en la isla y enferma renal crónica trasplantada de riñón, le acaban de retirar la cobertura de los medicamentos que necesita para seguir viviendo, y cuyo coste de más de 1.000 euros al mes no puede afrontar.
Alina acudió el pasado jueves día 18 a su médico de cabecera en el centro de salud de Valterra, en Arrecife. Como venía haciendo desde que en 2009 fue trasplantada de riñón, confiaba en que se le extendería la receta con los medicamentos que necesita para seguir adelante con su enfermedad. Sin embargo, el propio médico de cabecera se sorprendió cuando al ir a imprimir el reporte con las medicinas comprobó que le habían retirado la cobertura sanitaria. Sin aviso.
Ante la sorpresa del doctor, Alina fue a preguntar a las oficinas del centro de salud por la razones de este contratiempo, siendo informada, sin más, de que Sanidad había aplicado la entrada en vigor de las nuevas medidas de ahorro farmacéutico, lo que le impedía acceder a la cobertura pública de una parte importante de su coste. En definitiva, «ha sido usted dada de baja por orden ministerial», le dijeron.