Mencionados en una simple nota de prensa los más de tres mil ancianos que engrosan las listas de espera para acceder a una residencia en Gran Canaria pueden quedar fácilmente reducidos a una mera estadística. Una cifra más de las muchas que arrojan los estudios sobre la dramática situación social del Archipiélago.
(...) "Nosotros preferiríamos que nuestro
padre siguiera viviendo con nosotros, pero en casa no podemos darle los
cuidados constantes que necesita" - asegura Soledad G. , una mujer que
ronda los cincuenta años y que, como su esposo, se encuentra en el paro. Su
padre es uno de las 3069 mayores que - según datos del Cabildo que otras ONGs
incrementan - han solicitado atención en centros socio sanitarios públicos y
que tienen escasas esperanzas de conseguirla.
El propio consejero de Asuntos Sociales,
Francisco Santana, lo admite con meridiana claridad. “Es triste decirlo, pero si no hay
defunciones no hay nuevas plazas"
-reconoce Santana.
(...) Residencias como las de Moya y La
Aldea tiene serios problemas de financiación e incluso han recibido amenazas de
cierre. En La Aldea - según Francisco Santana - el desfase económico es de
400.000 euros. Las mismas dificultades, producto de la falta de financiación, enfrentan
en centros como los de Ingenio o Gáldar.