martes, 14 de junio de 2011

FALLECE OTILIA. UNA MÁS DE LAS MILLONES DE MADRES POBRES SOLIDARIAS. Los medios de comunicación siguen a lo suyo


QUIZÁ SEAN MILLONES, O MILES DE MILLONES, LAS MADRES-MAESTRAS QUE DAN LA VIDA SILENCIOSAMENTE. EN OTILIA RECIBAN TODAS ELLAS NUESTRO HOMENAJE. EL homenaje que jamás darán esas pseudofeministas que solo aspiran a satisfacer su bolsillo, su vanidad y su diversión.

Palabras de sus hijos (Arucas 9 de Mayo de 2011)

En nombre de la familia damos las gracias a todos los presentes y a cuantos nos han acompañado y han rezado por mi madre. Gracias por sus oraciones especialmente a los amigos del Movimiento Cultural Cristiano, que las han ofrecido desde muchos lugares de España.

A nuestra madre tenemos mucho que agradecerle, tenemos que agradecerle todo: Gracias mamá por darnos la vida, gracias por tu propia vida entregada cada instante, sin descanso. Gracias mamá por transformar tus sufrimientos en alegría compartida; por enseñarnos que una familia preocupada sólo de sus problemas no puede ser familia cristiana: por ello ofreciste muchas horas de servicio a esta comunidad cristiana, a los más débiles en los Hermanos Franciscanos de Cruz Blanca y a muchísimas otras personas que sufrieron enfermedad y necesitaron algún tipo de ayuda.

Gracias mamá por traerme de tu mano a la Iglesia convirtiéndome en uno de sus miembros por la bondad de Dios y porque velaste por que así fuera. Gracias por transmitirme la fe en Jesucristo a quien seguías desde el lugar preferido por Él y por ti, el último lugar. Gracias mamá por educarnos con tu testimonio de pobreza, humildad y sacrificio.

Por tu sacrificio nunca te quejabas; bromeabas con las enfermeras mientras te pinchaban y pasabas interminables horas de tratamiento sin perder el buen humor y la sonrisa.

La Virgen María fue la primera madre cristiana; gracias también a ti María por que la Iglesia de la que eres madre, ha hecho posible que surjan muchas madres cristianas como Otilia, que son escuela de solidaridad y esperanza para la humanidad.

Decía S. Juan de la Cruz que al atardecer de la vida se nos examinará del amor. Por la misericordia infinita de Dios, tenemos la certeza de que mi madre ha nacido a la vida eterna, porque a quien mucho ama, mucho se le perdona.

biografía: http://madrescontraelparo.blogspot.com/2011/06/una-madre-solidaria.html