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| Pepe Suárez asistente a un acto solidario en calle Triana |
Sin duda fue un acto muy emotivo y sentido, hay que reconocer que Pepe fue un constante recordatorio, testimoniado, hablado y escrito, de lo que tenía que ser la lucha por la justicia, según lo entendía Jesús de Nazaret, que lamentablemente no tiene ya casi nada que ver con la justicia que se predica hoy desde postulados políticos y sociales. Esto puede dar lugar a un debate entre las partes pero no es mi intención en estos momentos.
Como venía indicando el acto Eucarístico tuvo un buen encuentro entre las personas que asistieron, algunas de ellas con muchos años, demasiados, sin volver a encontrarnos o cambiar impresiones.
Creo que esta realidad es uno de los problemas actuales en una sociedad que va de puntillas por vida y convencidos del dicho de que cada palo aguante su vela. Sinceramente creo que este no es el mensaje de Jesús. Porque el Dios en el creemos está hecho de Amor y Solidaridad. Como todo lo creado.
Si me permiten voy a presentarme y apuntalar la moral que me fuerza para poder decir lo que estoy manifestando en relación con Pepe.
Conocí a Pepe allá por los años 1961-1962, yo todavía era soltero en aquellas fechas y él acababa de tomar los hábitos del sacerdocio. Coincidimos en el primer cursillo de vida para jóvenes que se celebró en el colegio de los Salesianos de Teror. Organizado por la Acción Católica de Las Palmas.
Anterior a estas fechas mi vida como cristiano, se desarrolló en el Colegio La Salle Antúnez de Las Palmas, y como antiguo alumno formamos un grupo unos 6 amigos que con la asistencia todos los sábados a la sabatina que se celebraba en la capilla del colegio hicimos una cercana amistad y los fines de semana, con otros que deseaban acompañarnos, nos dedicábamos a visitar asilos y chabolas del municipio para compartir algunas cosas que podíamos hacer, como era folclore, teatro y alguna información precisa, Quiero recordar de aquel grupo a Antonio Rodríguez González, Antonio González Hernández, Francisco Marrero García, José Rodríguez Bordón y Antonio Espiau entre otros.
Con este bagaje de sencillos compromisos y relaciones fui forjándome la necesidad de ahondar más en mi formación integral y me acerqué a otras organizaciones de la Iglesia, yendo a parar a la Acción Católica de jóvenes, entonces con un gran auge de actividad y vivencias. En ese ambiente y con esas influencias cristianas me encontré con Pepe como indico al principio.
Fue el momento en que me planteé mi relación formal para el futuro con la que posteriormente sería mi esposa con un proyecto de vida en común.
Pasaron unos dos años y cuando Pepe es nombrado Consiliario de la HOAC en la Diócesis Canariense se pone en contacto conmigo y empezamos a colaborar junto a otros compañeros en la lucha social, se formó el primer grupo cristiano de formación Social y Política a través de reuniones clandestinas en el coro de la parroquia de San Pablo. Ello se realizó por parte de Pepe sin perder como importante y prioritario la identidad cristiana de nuestro compromiso. Eso lo tuvo muy en cuenta Pepe que organizó precisos y prácticos planes de formación basados en el Plan de Encuestas de la HOAC, proceso y método realizado a nivel nacional por Guillermo Rovirosa (hoy en proceso de beatificación) junto al sacerdote D. Tomas Malagón, con quien tuve el honor de compartir posteriormente alguna conversación y reflexión cristiana.
Pasaron unos pocos años ocupado en las tareas normales de una nueva vida de familia y en el año 1966, yo ya tenía 4 hijos, había gemelos, me visitó Pepe en Las Chumberas, Las Palmas, acompañado por Julián Gómez del Castillo, militante obrero procedente de los grupos de Rovirosa y cofundador de la Editorial ZYX, de la que Pepe era primer delegado en Canarias. Esta editorial con la publicación de libros de bolsillo, iba orientada fundamentalmente a grupos de obreros y de estudiantes universitarios y su contenido comprendía una formación integral de la persona, respondiendo así a una participación necesaria en la sociedad en aquel momento. Lógicamente esta editorial fue muy seguida de cerca por las autoridades políticas de entonces que aplicaban la censura a rajatabla. Tuvo un auge muy importante en la formación cristiana con un compromiso social y político y de forma organizada comprendía para sus colaboradores un plan de formación humana que en Canarias llevaba Pepe muy bien, recuerdo que nos daba periódicamente unos hojas de papel cebolla azules y rosadas, que tenían como finalidad distinguir lo espiritual y lo social- político.
Yo estaba organizando por aquellas fechas, junto a otros compañeros, la primera asociación de vecinos de Canarias, en Las Chumberas, y segunda de España, al margen del Movimiento Nacional, ya que la primera se había constituido en Madrid, en la zona que se denominaba Pozo del Tío Raimundo.
En aquella visita de Pepe y Julián a mi casa me informaron entre otras cosas, que Pepe se iba a Madrid para realizar un cursillo de formación de larga duración, creo recordar que duraba unos seis meses.
Me propusieron la Delegación de Editorial ZYX sustituyendo a Pepe en aquellos momentos y así sucedió, tuve gran apoyo sobre todo de Antonio Guedes y Loli Moreno, de los grupos de Pepe, actualmente matrimonio veterano y activo con una gran familia, muy conocidos en el mundo cristiano, social y político de Canarias.
Precisamente Loli Moreno, junto a Fifí que sería mi esposa poco después, y otras dos personas formaron el primer grupo femenino de formación en la lucha social desde planteamientos cristianos, que junto al que se reunía en el coro de San Pablo, fue iniciado también por Pepe.
Posteriormente a estas vivencias conocimos a otras personas en diferentes islas, y en la de Gran Canaria, condiciendo en el tiempo con la lucha de aparcería en el sur de la isla, allí conocimos y compartimos futuro con Carmelo Ramírez y Camilo Sánchez entre otros. La trayectoria futura de estas dos personas, entre otras, son muy necesarias para darnos a conocer en profundidad las formas de trasmitir por Pepe la vida de compromiso.
Mientras todo ello sucedía con los planteamientos lógicos de una vida familiar, por mi parte tuve que solicitar mi traslado profesional a Tenerife, cosa que se me concedió.
Había empezado a trabajar en el Banco de Canarias en agosto de 1959, con alta desde enero de 1960. Me casé en diciembre de 1963 y me trasladé a Tenerife en septiembre de 1971. Al llegar a Tenerife pude comprobar el buen trabajo que Pepe estaba realizando con diferentes grupos. En aquel momento el consiliario de la HOAC en Tenerife era D. Elías Yánez.
Pepe Suarez tenía grupos de formación en varias islas del archipiélago, sobre todo además de Tenerife y Gran Canaria, en La Palma, Lanzarote y Fuerteventura, donde me llegué a reunir alguna vez con ellos. La coherencia de Pepe se trasmitía por los poros de las personas con quien me encontraba. Era un referente muy importante en el comportamiento ético para los que se metían en política institucional.
Con la llegada de la democracia en España se convocaron elecciones en 1979, y con mi regreso a la isla de Gran Canaria y considerando el caldo de cultivo que estaba creado a nivel social se constituye la organización de Asamblea de Vecinos que acuerda presentarse a las elecciones del 79. Hay que destacar que no éramos un partido político por lo que tuvimos de recoger firmas en la calle para poder acceder a ser una agrupación electoral.
Más tarde esta organización se convertiría en un partico político, con el nombre de Asamblea Canaria Nacionalista. Aquí ya yo no pertenecía a la organización.
La marcha de este mundo de Pepe, gozando ya de la visión del Creador por la eternidad, debe dejarnos principalmente un mensaje que creo tengo que compartir: “ante una realidad de nuestro mundo político que carece en gran parte de honestidad y transparencia, sin mucha aceptación para hacer y desarrollar el Bien Común sobre todo en los más necesitados, entendiendo la economía como un servicio y no como un objetivo, es necesario que demos un paso al frente y no nos escondamos en falsos y equívocos posicionamientos amorfos y sin un contenido claro”.
No nos estemos preguntado constantemente qué más puedo hacer, cuando todo un mundo, también muy cercano a nosotros, necesita acompañamiento y respuestas acordes con sus necesidades. Compartamos correctamente los bienes y perdonemos las trastadas, por llamarlas suavemente así, que hemos estado haciendo durante mucho tiempo sin aportar mejoras cercanas. Hagamos un hoy y un mañana, siendo coherentes y consecuentes como a Pepe le hubiera gustado.
Herramientas existen para quien quiera conocerlas: Las encíclicas sociales de los papas, escritas con aplicaciones para el comportamiento humano, y crear entre la especie humana un aro de hermandad, con una distribución correcta de los bienes, de lo que no se da la información precisa por otros medios ya que no hay interés en reconocer lo que se quiere justificar por los modos de vida que lleva casi toda la sociedad.
Cristo pasó por el mundo ofreciendo una vida mejor y más justa para eso dió su vida. ¿Y nosotros qué damos?
El mejor recuerdo que le podemos dejar a Pepe es que asumamos cada uno la responsabilidad que le toca en la vida y demos el paso del compromiso social y político desde una visión cristiana, que acoge a todo aquel venga de donde venga que luche por el Bien Común.
Gracias por su paciencia.
Fernando Carrascosa.
