En la "Hora Santa" del Jueves santo de la parroquia de san Marcos, junto con la oración y adoración hemos podido escuchar dos testimonios de amor de "los santos de la puerta de al lado". En el hospital de Gran Canaria unos sanitarios se las ingeniaron para que las personas que morían por Covid, pudieran despedirse de sus seres queridos si así lo deseaban todos; y con todas las medidas de seguridad. Nos lo relata Francisco Puñal.
Por su parte Celina nos cuenta la "vida y milagros" de su hermano el sacerdote Santiago Suárez -Chago- y de como la burocracía lo mató. No el Covid sino la soledad decretada no se sabe muy bien por quién...