Facua-Consumidores en Acción
ha elaborado una lista con los abusos que pueden sufrir los pasajeros
al comprar un billete de avión y da algunos consejos para solventar
cualquier problema a la hora de viajar en este transporte.

Se trata de irregularidades ante las que los usuarios deben reclamar
ya que tienen derecho a recuperar las cantidades cobradas ilegalmente o
incluso el importe íntegro del billete, recibir una compensación
económica o una indemnización por daños y perjuicios.
Una de los abusos más común es la
subida del precio del billete cuando se vuelve a entrar en la página web
después de haber comparado entre diferentes ofertas. Puede que durante
ese tiempo la compañía vendiese varios billetes y haya decidido aplicar
un incremento.
Sin embargo, no se descarta que durante la primera visita, la web se
quedase con el IP y al comprobar que el usuario sigue interesado,
muestra un precio más alto en la confianza de que, por miedo a una nueva
subida, se realice la compra.
Facua afirma que se puede verificar si han utilizado esta técnica
reiniciando el módem (si la conexión no tiene IP fija) o desactivando y
volviendo a activar la conexión a datos móviles del smartphone.
Otras de las infracciones cometidas por muchas compañías aérea son el cobro de un plus por elegir asiento
En segundo lugar, hay compañías que cobran un
suplemento por pagar con tarjeta, algo que está prohibido por la ley, o hacen al pasajero
contratar un seguro por miedo a viajar sin ninguno, cuando el precio del billete ya lleva incluido por ley el seguro obligatorio de viajeros.
Otras de las infracciones cometidas por muchas compañías aérea son el
cobro de un plus por elegir asiento,
que obliguen a elegirlo o que no confirmen la compra del billete tras
realizar el pago, obligando al pasajero a llamar a una “carísima” línea
902 o, en el peor de los casos, a un “fraudulento” 807.
IDENTIFICACIÓN EN AEROPUERTOS
En el puesto número seis aparece que no dejen embarcar a un pasajero que no lleve DNI, mientras el
Plan Nacional de Seguridad Aérea reconoce como documentación válida los documentos de identidad expedidos en cualquier país de la Unión Europea, así como el
pasaporte, el
carné de conducir español y el permiso de residencia en España o en alguno de los Estados firmantes del tratado de Schengen.
En el caso en el que la compañía exija a los niños llevar el DNI,
Facua indica que la normativa establece que los pasajeros españoles
menores de 14 años, en vuelos nacionales, están exentos de llevar
documentación, siendo en todo caso responsable de los mismos la persona
con la que realiza el viaje.
COMPENSACIÓN POR ‘OVERBOOKING’ O CANCELACIONES
Por su parte, la compañía deberá indemnizar al pasajero con una
compensación económica de entre 250 y 600 euros cuando se produzca ‘
overbooking‘ o se
cancele el vuelo, al igual que si el vuelo se retrasa y llega al menos
tres horas tarde, siempre que no se produzcan por una causa de fuerza mayor (un terremoto, la erupción de un volcán…) o una huelga.
En este último caso, la compañía debe hacerse cargo de los gastos y
alojamiento pero se elimina el derecho a la compensación económica
directa de entre 250 y 600 euros.
También se puedes pedir una indemnización por daños y perjuicios si
el retraso supone una pérdida económica o un daño moral que se pueda
acreditar. Y si el retraso es de tantas horas que ha frustrado el
objetivo del vuelo, se puede exigir la devolución del importe del
billete.
Además, si el ‘overbooking’, retraso o cancelación provoca que el
pasajero pierda una conexión con otro avión, autobús, tren o barco, la
aerolínea responsable debe asumir los gastos y alojamiento mientras espera y pagarle el nuevo billete.
LAS MALETAS
Si el problema son las maletas, la compañía pagará la reparación o una
nueva si aparece rota tras el vuelo, y cuando desaparezcan tendrá que
abonar los gastos de los objetos que el pasajero compre mientras espera
su maleta y en el caso que no vuelva a aparecer dará una indemnización.
Para otros problemas de importancia que el pasajero sufra dentro del
aeronave, como intoxicación alimentaría o caída porque un pasajero dejó
algo en el pasillo, el viajero puede realizar reclamaciones para exigir
una indemnización por daños y prejuicio