Europa Press / Las Palmas de Gran Canaria
Gran Canaria malgasta más de 6 millones de euros al año en agua debido
al mal hábito de no cerrar el grifo durante acciones cotidianas como el
enjabonado en la ducha, el cepillado de dientes, afeitarse, fregar o
lavar el coche, según ha detallado el Cabildo insular en nota de prensa.
Para la Institución insular, el gesto de ahorrar agua "era muy común
hace unos años", cuando el agua de los bidones se acababa, pero "ahora
que el suministro es continuo se ha perdido sensibilidad" sin reparar en
que el problema en Gran Canaria es que el agua de consumo "hay que
fabricarla [desalarla, potabilizarla, etc]", lo que conlleva un
importante coste económico.
En Gran Canaria, el consumo urbano asciende a unos 60 millones de
metros cúbicos, y con pequeños gestos como cerrar el grifo el gasto
bajaría un 10 por ciento, ahorrando el coste de producir 6 millones de
metros cúbicos, lo que se traduce económicamente en 6 millones de euros.
El agua y el dinero que se derrocha por su mal uso es un coste que no
se repercute en su totalidad en la factura final pero que igualmente
costea la ciudadanía grancanaria a través de las arcas públicas.
Aproximadamente, ·tres de esos millones salen de los bolsillos de las
familias y los otros tres del Cabildo y los ayuntamientos, un dinero que
se podría destinar a seguir mejorando las instalaciones o a la
eficiencia energética, entre otras medidas", asegura la Institución.