La constatación de las numerosas irregularidades contables en la gestión de Inalsa, al menos desde el año 2006, es “un hecho objetivo”. Así lo considera la Fiscalía de Las Palmas en un escrito incorporado a la instrucción del caso Inalsa, que instruye el Juzgado número 4 de Arrecife.
En ese escrito, el fiscal Miguel Ángel Hernández dice que las irregularidades contables “no solo quedan en ese ámbito de defectuosa llevanza de la gestión y control económico y financiero de Inalsa, sino que pudieran ser reveladoras de la comisión de otra suerte de hechos con relevancia penal”.
El fiscal hace referencia a los informes de 2006, 2007 y 2008 en los que se evidencia “el absoluto descontrol en almacenes y existencias así como en las cifras por facturación de servicios, reflejándose un relevante desajuste entre lo que aparece en la contabilidad y lo que efectivamente consta en el programa informático de facturación utilizado por Inalsa”.
La Fiscalía contesta en ese escrito a la solicitud de archivo que había realizado una de las dos personas investigadas hasta ahora dentro del caso, el ex gerente Rafael Elorrieta, yerno de Dimas Martín, que ya declaró en calidad de investigado en los Juzgados de Arrecife.