Las pacifistas repartieron entre las personas viandantes folletos, pegatinas y pasearon las pancartas de la campaña: “Fiestas sin armas, Fiestas sin ejércitos”, con la que se denuncian estas actividades de publicidad militar que pretenden normalizar la presencia, la necesidad y la legitimidad de los ejércitos, presentándolos como organizaciones benéficas. Intentan también contrarestar el rechazo popular a las guerras de ocupación, ahora la prevista en Siria, y justificar la cooperación española en la OTAN, en su guerra permanente contra los pueblos.
Agentes de la Guardia Civil, antes del desfile confiscaron las pancartas, los panfletos y las pegatinas y desalojaron a las antimilitaristas de la plaza, tras identificarlos. La Coordinadora Canaria Por la Paz lamenta la vulneración del derecho de libertad de expresión y se reitera a instar a personas, asociaciones y entidades públicas a decir no a la cultura militar, a desobedecer a la guerra no prestando apoyo ni recursos a su preparación y justificación y a rechazar las causas que la generan.
La Guerra comienza aquí: ¡Parémosla aquí!