domingo, 29 de marzo de 2009

EXPLOTACION SIGLO XXI



La firme determinación de Marta Pérez, una tinerfeña envenenada hace diez años por los pesticidas utilizados por la empresa BONNY, S.A. en sus invernaderos, ha permitido sacar a la luz pública la pervivencia de relaciones con claras reminiscencias "serviles" en el agro canario, dominado aún por los grandes propietarios-exportadores del Archipiélago. En pleno siglo XXI, miles de trabajadores de las islas e inmigrantes pobres continúan sufriendo una extrema explotación, que incluye la exposición a sustancias tóxicas que pueden causar graves secuelas de por vida o incluso provocar la muerte. ¿Son tan diferentes las condiciones laborales del jornalero de hoy en día a las
que debían soportar en los años 40 del pasado siglo los trabajadores de Juliano Bonny Gómez, fundador de la saga familiar que controla actualmente la principal organización productora-exportadora de tomates de España?