Cinco bibliotecas o centros culturales de Las Palmas de Gran Canaria que dejó terminados el PP continúan cerrados siete meses después
RAÚL GIL / LAS PALMAS DE GRAN CANARIA. Siete meses después del cambio de gobierno local, ni se ha creado la anunciada Sociedad de la Cultura (similar a la Sociedad de Promoción) y lo que es más evidente a ojos del ciudadano de a pie, hay cinco bibliotecas o centros culturales cerrados por dejadez institucional.El PP, ahora en la oposición, no deja de recordarle al gobierno local que esos cinco centros los dejaron ellos casi terminados sólo pendientes de pequeños remates para ser abiertos e inaugurados por los nuevos regidores. Pero el gobierno local del PSC no ha encontrado hueco en los siete meses que lleva dirigiendo la ciudad para solucionar los pequeños flecos que mantienen cerrados a cal y canto cinco infraestructuras culturales en cinco barrios de la capital. El PP habla de "desidia" del grupo de gobierno.Sea la razón que sea, los datos y los centros con las puertas cerradas están ahí para comprobarlo. Uno de los casos más sangrantes es el de la biblioteca del Canódromo, un gran espacio cultural con dos plantas que debe acoger, además de la biblioteca, sala de estudio, mediateca, sala de informática y una pequeña sala de exposiciones.La biblioteca del Canódromo fue una de las grandes apuestas culturales del PP en Ciudad Alta y a falta de 15 días para las elecciones del 27-M sólo quedaba conectarle la luz para inaugurarla.Pues bien, el PP perdió las elecciones y el PSC se quedó con el honor de cortar la cinta el día de la inauguración. Pero no ha sido así. Siete meses después, la biblioteca sigue con las puertas cerradas, con los ordenadores conectados y con los libros en las estanterías.La razón: sigue faltando el permiso de Industria para conectarse a la red eléctrica. Desde el PP se considera inadmisible que aún se esgrima esa razón. "¿Tan difícil es llamar a la Consejería de Industria, todas las veces que hagan falta, y pedirles que les den el permiso? ¿Necesitan siete meses sólo para eso?", se pregunta el concejal del grupo municipal del PP, Ángel Sabroso.BIBLIOPLAYA. Otra biblioteca que permanece cerrada sólo a falta de una conexión es la Biblioplaya. Considerada un "mamotreto" por el gobierno socialista y gran parte de la ciudadanía, lo cierto es que prestaba un gran servicio a los vecinos de Guanarteme y Las Canteras, escasos de este tipo de infraestructuras. La Biblioplaya, sin embargo, sí la inauguró el PP y estuvo funcionando hasta septiembre, cuando el nuevo gobierno creyó conveniente trasladarla de la plaza de Churruca (donde molestaba a las obras de ampliación) hasta las canchas situadas en el paseo de Las Canteras junto al solar de La Cícer, un lugar en principio idóneo. Pero al igual que en el Canódromo, la Biblioplaya, cinco meses después del traslado, sigue con sus puertas cerradas a falta de una conexión eléctrica. Y mientras tanto, vecinos y usuarios de la playa se asoman cada día a las ventanas del bloque prefabricado con la vana esperanza de volver a entrar y conectarse a internet o solamente leer el periódico.Otro espacio cultural que está totalmente terminado y cerrado con llave es el local social de Hoya de la Plata. Acabado en octubre pasado, el local, que debería albergar salas de estudio y talleres de formación para mayores del Cono Sur, esta cerrado y acumulando polvo a la espera del impulso municipal definitivo para amueblarlo y ponerlo en marcha.TENOYA. Los otros dos centros que permanecen cerrados y sin actividad alguna son dos edificios históricos que deberían abrir como espacios culturales tras su rehabilitación. Uno es la antigua escuela de Tenoya, cuyas obras de rehabilitación fueron adjudicadas por el PP y ahora están paradas a falta de pequeños retoques que nadie del gobierno ha reclamado a la empresa en la que recayó la obra. El otro centro se localiza en San Nicolás, un viejo edificio del siglo XIX junto a la iglesia, y que estaba llamado a convertirse en biblioteca y centro polivalente. Su rehabilitación comenzó en marzo de 2007 por personal municipal y después de mayo las obras se pararon, según el PP, porque falta voluntad de los regidores socialistas."Cuando decimos que no hay gestión es que los concejales del gobierno no están encima de las cosas, no les hacen un seguimiento", señala Sabroso, "el caso del permiso de Industria es el más evidente, pero lo mismo pasa con las otras bibliotecas, parece que los ediles están más pendientes de pelearse entre ellos".