"El desafío que nos lanza la sociedad actual a la pretensión de verdad de la fe cristiana, que nos provoca a creer de una forma más personal, libre y auténtica; y por la necesidad que tenemos de reformar nuestras estructuras pastorales para realizar mejor la única misión de la Iglesia, que es el anuncio del Evangelio e invitar a los hombres a la fe en Dios de una forma bella y creíble. Precisamente para esto, ha convocado Benedicto XVI este año de la fe y el Sínodo sobre la Nueva Evangelización para la transmisión de la fe. Si el papa, con 85 años, tiene este coraje y valentía, ¿podemos quedarnos los demás sin entrar a este desafío?"