V. MARTIN, S/C de La Palma Los municipios de La Palma necesitan más políticos para gestionar servicios públicos que médicos de Atención Primaria que afronten las urgencias o enfermedades comunes, según se desprende de la comparativa realizada por EL DÍA entre los representantes públicos con sueldos de los ayuntamientos, un total de 63, a los que se deben sumar una veintena de asesores; y los facultativos en centros de salud o consultorios, apenas 54, junto a una docena escasa de pediatras, una situación que se agrava cuando los recortes afectan más a la Sanidad que a los partidos políticos.
Las diferencias más notables se producen entre políticos y médicos en los núcleos rurales. En Fuencaliente, con menos de 2.000 habitantes, el ayuntamiento cuenta con el alcalde y tres concejales liberados, es decir, cuatro personas a sueldo, mientras que para la atención sanitaria dispone de tan solo un doctor que pasa consulta desde las ocho de la mañana hasta las tres de la tarde. En este pueblo la situación es aún más compleja si se tiene en cuenta que tiene un único policía local, con horario de funcionario y al que no se sustituye en período vacacional, y, encima, el Gobierno de Canarias pretende reducir la oferta educativa del municipio.
Para las urgencias médicas de tarde, los fuencalenteros tienen que desplazarse a la Villa de Mazo, donde hay cuatro médicos y cuya corporación local paga a su alcaldesa uno de los mejores sueldos de La Palma en lo que a regidores municipales se refiere (2.600 euros líquidos), además de sumar otros dos concejales liberados.
Al otro lado de la Isla la situación también es "curiosa", por no definirla de otra manera. Puntagorda tiene un solo médico para una población de unos 2.000 habitantes. Esos mismos residentes precisan, sin embargo, de hasta tres políticos cobrando de las arcas municipales para gestionar los servicios. En su frontera, Tijarafe tiene dos doctores y, por el contrario, son cinco los concejales que cobran en jornada completa, es decir, PP y PSC pusieron emolumentos a 5 de sus 6 representantes. El alcalde está jubilado y tiene una nómina de 1.900 euros.
Garafía bajó sueldos.- El Ayuntamiento de Garafía ha sabido reaccionar, el único, a las actuales circunstancias económicas. Hasta este mes de julio, contaba con cuatro concejales más el alcalde cobrando un sueldo. Sin embargo, el regidor municipal decidió percibir el salario mínimo interprofesional, unos 640 euros, y dejar sin nómina a dos ediles, en coherencia con la necesidad de reducir personal municipal por la crisis económica. Esta postura fue incluso criticada por otros alcaldes. Para la Atención Primaria en el municipio más alejado de los principales servicios insulares, solo hay un médico de familia.
También rompe la "norma" el grupo de gobierno de San Andrés y Sauces, que tras las elecciones de mayo de 2011, con el PSC logrando la mayoría absoluta, puso en nómina solo al alcalde. Es cierto que el regidor municipal tiene a dos personas de confianza, pero ningún otro concejal recibe dinero alguno con cargo al ayuntamiento, pese a dar servicios a unos 5.000 habitantes. En su centro de salud pasan consulta cuatro médicos.
En la otra localidad norteña, Barlovento, no ocurre lo mismo. Más bien, al contrario. Su población tiene un médico, pero para gestionar las necesidades de un pueblo de poco más de 2.000 habitantes necesita de tres liberados, cifras que se copian en Puntallana, con la única excepción de que el alcalde en esta última localidad percibe su sueldo de la Consejería de Educación.
Las Breñas.- En los municipios de Breña Alta y Breña Baja se cuentan por igual políticos con un sueldo a fin de mes que facultativos. En concreto, en los centros de salud de ambos municipios trabajan un total de siete médicos de familia, mientras que el ayuntamiento de Breña Baja paga a cuatro concejales y su "vecino", a tres. Por tanto, las necesidades de Atención Primaria y de gestión municipal son semejantes o, al menos, es lo que dicen las cifras.
Tampoco parece lógico que El Paso tenga más concejales a cargo del ayuntamiento, seis, que médicos, cuatro; o que en Tazacorte hayan existido serias dificultades para cubrir adecuadamente el consultorio del Puerto y que luego la corporación local tenga cinco ediles a sueldo, por mucho que dos dispongan de nómina municipal al ser funcionarios.
Por último, en los dos municipios más poblados, Los Llanos de Aridane y Santa Cruz de La Palma, la situación es diferente. El Ayuntamiento capitalino tiene nada menos que 11 concejales, incluyendo al alcalde, que tienen un sueldo del ayuntamiento, una cifra ciertamente elevada, mientras que en el centro de salud desarrollan su labor 13 médicos de familia. Curiosamente, Los Llanos, pese a ser con diferencia la localidad con más habitantes, dispone de 8 ediles liberados, seis con dedicación absoluta, y un total de doce médicos.
En esta información no se tienen en cuenta los servicios políticos o sanitarios de carácter insular, es decir, aquellos que se prestan tanto en el Hospital General de La Palma como desde el Cabildo palmero, además de sumar el número de diputados regionales y nacionales, cargos intermedios, senadora...