Según informa José Mújica en Canarias7 los episodios que se viven estos días con la línea marítima que una Canarias con Tarfaya (África) bordean el ridículo.
El delegado del Gobierno, José Segura, sacó pecho para defender lo injustificable: ¿por qué no está operativa un año después de recibir la bendición política?
Segura insistió en que la naviera Armas podrá operar a finales de septiembre (es la tercera fecha que coloca en el cartel el delegado) y matizó, además, que el único permiso tramitado ante la Dirección General de la Marina Mercante es para la isla de Fuerteventura. Y es en tierras majoreras donde surge el problema, sobre todo, de siglas políticas.
Fuerteventura es la isla más próxima a Marruecos. Un barco de la antigüedad del Assalama (antes Ciudad de La Laguna), con más de 40 años de navegación, tarda unas dos horas y 20 minutos, un tiempo que se reduce con la incorporación de un buque más moderno. Desde Lanzarote la duración casi se duplica, una poderosa razón para desechar la vía conejera, pero en Canarias las cosas no se razonan por su simpleza. En Canarias, junto al interés regional, hay que valorar las ambiciones o tramas insulares.
El Cabildo de Fuerteventura está gestionado por un pacto entre Asamblea Majorera (Coalición Canaria) y el Partido Popular, mientras que el de Lanzarote corresponde a otra alianza bien distinta, PSOE-PIL.
La presidenta del Cabildo consejero, Manuela Armas, viajó hace muy poco a la sede madrileña del Ministerio de Fomento para exigir de su compañera de partido, Magdalena Álvarez, el mismo trato que Puertos del Estado le dispensaba a Fuerteventura. O sea, que el reto de estar más lejos de Marruecos fue obviado por la ministra.
viernes, 31 de agosto de 2007
martes, 28 de agosto de 2007
Así piensa reprimir Rubalcaba a los inmigrantes pobres
Interior ha elaborado su primer protocolo de actuación para las repatriaciones de inmigrantes. En ese documento, la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil autoriza un amplio abanico de medidas de fuerza contra los que se opongan a su deportación y prevé su inmovilización siempre que no se pongan en riesgo las «funciones vitales» del repatriado.
El borrador, con fecha del pasado 20 de julio y que el Gobierno pretende aprobar en las próximas semanas, unifica, según portavoces de Interior, las hasta ahora dispersas normas de actuación durante los viajes de deportación e incluye las últimas normativas europeas sobre las deportaciones.
La futura directiva permite que los funcionarios puedan reducir a los «repatriados que se resistan» con «lazos de seguridad» (bridas de plástico), «cascos», «prendas inmovilizadoras homologadas» (que no se especifican), «cinturones», «esposas o similares» e, incluso, «cinta reforzada», más conocida con el nombre comercial de «cinta americana».
No obstante, la nueva normativa insiste en que, en principio, los inmigrantes no deberán ser inmovilizados totalmente si no provocan incidentes y que la aplicación de las medidas coercitivas tendrá que ser «motivada» y autorizada por el agente responsable del dispositivo.
El documento reitera que estos medios coercitivos para reducir a los inmigrantes no pueden poner en peligro «su dignidad ni integridad física». «El uso de estos procedimientos deberá ser proporcionado y con respecto a los derechos individuales de los repatriados», apostilla la directiva. Además, en el caso de que haya menores en el contingente, cualquier acción violenta contra el pasajero rebelde deberá hacerse lejos de la vista de los niños y adolescentes.
El texto apunta que en todo momento «los cinturones de seguridad de los repatriados se mantendrán atados durante el vuelo» y sólo se «cortarán los lazos de seguridad» cuando el jefe del dispositivo policial así lo crea conveniente. Los inmigrantes únicamente podrán ir al baño acompañados de un funcionario.
La normativa deja a criterio del responsable policial del vuelo la posibilidad de mantener desorientados a los repatriados teniendo durante todo el viaje las «cortinillas cerradas» para evitar que los inmigrantes intuyan a dónde se dirigen. Los agentes, que nunca podrán portar armas de fuego, no podrán tampoco llevar en los aviones ningún otro tipo de arma o herramienta peligrosa, «salvo el material profesional de los módulos de intervención y seguridad» (antidisturbios).
Narcóticos.
La directiva prohíbe que los policías droguen a los inmigrantes durante las operaciones de expulsión, tal y como ocurrió en 1996 cuando el departamento que encabezaba Jaime Mayor Oreja repatrió a Mali a inmigrantes narcotizados. No obstante, el texto deja un resquicio legal para utilizar drogas con el fin de apaciguar a los expulsados.
«El uso de sedantes para facilitar la expulsión está prohibido, salvo prescripción facultativa», señala el borrador, que apunta que sólo un médico del Cuerpo de Policía, que acompañará siempre a las expediciones, «podrá, después de realizar un diagnóstico, administrar medicamentos a los repatriados». Los equipos de expulsión tendrán en su poder antes del vuelo todos los historiales de los repatriados «que presenten particularidades médicas o que necesiten recibir tratamiento médico».
El borrador, con fecha del pasado 20 de julio y que el Gobierno pretende aprobar en las próximas semanas, unifica, según portavoces de Interior, las hasta ahora dispersas normas de actuación durante los viajes de deportación e incluye las últimas normativas europeas sobre las deportaciones.
La futura directiva permite que los funcionarios puedan reducir a los «repatriados que se resistan» con «lazos de seguridad» (bridas de plástico), «cascos», «prendas inmovilizadoras homologadas» (que no se especifican), «cinturones», «esposas o similares» e, incluso, «cinta reforzada», más conocida con el nombre comercial de «cinta americana».
No obstante, la nueva normativa insiste en que, en principio, los inmigrantes no deberán ser inmovilizados totalmente si no provocan incidentes y que la aplicación de las medidas coercitivas tendrá que ser «motivada» y autorizada por el agente responsable del dispositivo.
El documento reitera que estos medios coercitivos para reducir a los inmigrantes no pueden poner en peligro «su dignidad ni integridad física». «El uso de estos procedimientos deberá ser proporcionado y con respecto a los derechos individuales de los repatriados», apostilla la directiva. Además, en el caso de que haya menores en el contingente, cualquier acción violenta contra el pasajero rebelde deberá hacerse lejos de la vista de los niños y adolescentes.
El texto apunta que en todo momento «los cinturones de seguridad de los repatriados se mantendrán atados durante el vuelo» y sólo se «cortarán los lazos de seguridad» cuando el jefe del dispositivo policial así lo crea conveniente. Los inmigrantes únicamente podrán ir al baño acompañados de un funcionario.
La normativa deja a criterio del responsable policial del vuelo la posibilidad de mantener desorientados a los repatriados teniendo durante todo el viaje las «cortinillas cerradas» para evitar que los inmigrantes intuyan a dónde se dirigen. Los agentes, que nunca podrán portar armas de fuego, no podrán tampoco llevar en los aviones ningún otro tipo de arma o herramienta peligrosa, «salvo el material profesional de los módulos de intervención y seguridad» (antidisturbios).
Narcóticos.
La directiva prohíbe que los policías droguen a los inmigrantes durante las operaciones de expulsión, tal y como ocurrió en 1996 cuando el departamento que encabezaba Jaime Mayor Oreja repatrió a Mali a inmigrantes narcotizados. No obstante, el texto deja un resquicio legal para utilizar drogas con el fin de apaciguar a los expulsados.
«El uso de sedantes para facilitar la expulsión está prohibido, salvo prescripción facultativa», señala el borrador, que apunta que sólo un médico del Cuerpo de Policía, que acompañará siempre a las expediciones, «podrá, después de realizar un diagnóstico, administrar medicamentos a los repatriados». Los equipos de expulsión tendrán en su poder antes del vuelo todos los historiales de los repatriados «que presenten particularidades médicas o que necesiten recibir tratamiento médico».
domingo, 26 de agosto de 2007
EL CINISMO DEL CENTRO CANARIO
Dice ser centrista pero carece de entrañas. El problema no es el sufrimiento de los débiles sino la “amenaza” que suponen. Hay que ser cínico. Ahora quiere policía autonómica que reprima aún más a los que mueren.
El presidente del Centro Canario, Ignacio González, advirtió hoy del "colapso" que pueden sufrir los centros de retención y de menores en Canarias, si prosigue la llegada de inmigrantes a las Islas, y pidió que el Frontex sea "un cuerpo de policía de fronteras permanente bajo mando único europeo". Sobre la que calificó como "afluencia masiva de inmigrantes ilegales a Canarias que se está produciendo nuevamente este verano", González criticó en un comunicado que "siguen entrando libremente y desembarcando" en las playas de las Islas "sin ningún control y sin que nada ni nadie los detecte". A su juicio, esto "pone en evidencia los sistemas de vigilancia exterior (SIVE) que anunció en su día la Delegación del Gobierno" en Canarias.
El CCN cree que si continúa la llegada masiva de inmigrantes a Canarias "se colapsarán los centros de retención y de menores, ahora que además el resto de las comunidades autónomas se niegan a acoger a los menores". El presidente de la formación política consideró "un contrasentido que se haya desmontado el dispositivo Frontex europeo en medio de una nueva avalancha de inmigrantes hacia las Islas". Por ello, consideró que el Ejecutivo regional debe reclamar "más medios inmediatamente a Madrid y a la Unión Europea y una solución definitiva para el control de los flujos migratorios hacia Canarias".
"Si el Gobierno español sigue pasando de Canarias y permitiendo que sus fronteras sigan siendo un verdadero coladero, la comunidad autónoma deberá solicitar a la UE la creación de un cuerpo de policía de fronteras bajo mando único que aplique los mismos criterios en todos los estados", aseveró González. El dirigente del CCN consideró, así mismo, que Canarias debe crear "la policía autonómica para llevar a cabo, entre otras funciones, las de policía de inmigración".
El presidente del Centro Canario, Ignacio González, advirtió hoy del "colapso" que pueden sufrir los centros de retención y de menores en Canarias, si prosigue la llegada de inmigrantes a las Islas, y pidió que el Frontex sea "un cuerpo de policía de fronteras permanente bajo mando único europeo". Sobre la que calificó como "afluencia masiva de inmigrantes ilegales a Canarias que se está produciendo nuevamente este verano", González criticó en un comunicado que "siguen entrando libremente y desembarcando" en las playas de las Islas "sin ningún control y sin que nada ni nadie los detecte". A su juicio, esto "pone en evidencia los sistemas de vigilancia exterior (SIVE) que anunció en su día la Delegación del Gobierno" en Canarias.
El CCN cree que si continúa la llegada masiva de inmigrantes a Canarias "se colapsarán los centros de retención y de menores, ahora que además el resto de las comunidades autónomas se niegan a acoger a los menores". El presidente de la formación política consideró "un contrasentido que se haya desmontado el dispositivo Frontex europeo en medio de una nueva avalancha de inmigrantes hacia las Islas". Por ello, consideró que el Ejecutivo regional debe reclamar "más medios inmediatamente a Madrid y a la Unión Europea y una solución definitiva para el control de los flujos migratorios hacia Canarias".
"Si el Gobierno español sigue pasando de Canarias y permitiendo que sus fronteras sigan siendo un verdadero coladero, la comunidad autónoma deberá solicitar a la UE la creación de un cuerpo de policía de fronteras bajo mando único que aplique los mismos criterios en todos los estados", aseveró González. El dirigente del CCN consideró, así mismo, que Canarias debe crear "la policía autonómica para llevar a cabo, entre otras funciones, las de policía de inmigración".
miércoles, 22 de agosto de 2007
ATADOS EN UN CAYUCO
Nunca más volveré a subirme a un cayuco. Ni rezar me ayudó -dice el musulmán Mamadou Coulibaly- no ves como salvarte, sabes que vas a morir.
Salió de Mauritania donde debe 1.400 euros, tras aportar el sueldo de su padre de un años y lo conseguido con la venta de sus vacas. Su padre murió (¿) quince días después de ser hospitalizado Mamado.
Viajamos atados con una soga al cayuco para no movernos y evitar caernos al mar, eramos muchos, algunos murieron en el viaje y los tiramos por la borda. A los pocos días de salir no teníamos agua ni comida. No podíamos movernos de nuestro sitio porque si lo hacíamos perdíamos espacio. Los demás te pueden desplazar y acabas en el agua. Vi a un amigo morir.
Perdió ambas piernas por la infección que le causó la fricción de la cuerda. En el hospital se las amputaron para salvar su vida..
Este guineano de 24 años quiere trabajar para pagar la deuda de 1.400 euros que contrajo en su país. Hoy se traslada en silla de ruedas.
Salió de Mauritania donde debe 1.400 euros, tras aportar el sueldo de su padre de un años y lo conseguido con la venta de sus vacas. Su padre murió (¿) quince días después de ser hospitalizado Mamado.
Viajamos atados con una soga al cayuco para no movernos y evitar caernos al mar, eramos muchos, algunos murieron en el viaje y los tiramos por la borda. A los pocos días de salir no teníamos agua ni comida. No podíamos movernos de nuestro sitio porque si lo hacíamos perdíamos espacio. Los demás te pueden desplazar y acabas en el agua. Vi a un amigo morir.
Perdió ambas piernas por la infección que le causó la fricción de la cuerda. En el hospital se las amputaron para salvar su vida..
Este guineano de 24 años quiere trabajar para pagar la deuda de 1.400 euros que contrajo en su país. Hoy se traslada en silla de ruedas.
sábado, 18 de agosto de 2007
Coalición Canaria de nuevo
Rebeca Chacón
Canarias7
Las señales que en las últimas semanas están llegando de los nuevos mandamás del Gobierno regional anuncian la vuelta a un discurso nacionalista que hacía años que no se pronunciaba en las Islas. Tanto Paulino Rivero como su mano derecha en el Ejecutivo canario, José Miguel Ruano, han echado mano de los ancestros de CC para volver a entonar el cántico antimetropolis típico de otros tiempos, cuando las comunidades autónomas nacían y había mucho que explicar a Madrid. Con la «mano tendida» pero también con «firmeza», juran y perjuran que Canarias «no se arrodillará» ante el Estado, Pero, ¿quién ha hablado de hincar la rodilla en el suelo?
Por el momento y a falta de que Madrid diga esta boca es mía, las amenazas de los nacionalistas suenan a poner la venda antes de la herida. Que se sepa, ningún representante del Gobierno español ha dado con la puerta en la cara a algún consejero del Ejecutivo presidido por Rivero. Que se sepa y exceptuando a Caldera (el responsable de Trabajo es siempre un punto y aparte), no hay ministro que se haya negado a cumplir algún acuerdo alcanzado con el Archipiélago.
En cambio, hay datos de otro tipo que podrían explicar en parte el grito nacionalista del presidente. El primero es evidente, aunque a alguno le duela recordarlo: CC ha perdido su grupo parlamentario en el Congreso y necesita una voz alternativa para demostrar que sigue existiendo. Sin megáfono en la capital, el Gobierno regional está obligado a convertirse en el pepito grillo del que tanto huyó en la anterior legislatura Adán Martín.
Entender el discurso reivindicativo adoptado en estos primeros compases por el Ejecutivo canario pasa también por recordar que hace meses que ningún ministro de Zapatero llama a la puerta de CC. Solbes está haciendo los presupuestos estatales del próximo año sin escuchar las reivindicaciones de los nacionalistas y eso, aunque a alguno le cueste reconocerlo, duele mucho a quienes se han llenado la boca durante años con lo que mandan en Madrid.
Tercer y definitivo ingrediente para componer el plato del cántico nacionalista: en marzo de 2008 hay elecciones generales. Con los resultados de los comicios autonómicos, resulta una quimera pensar en que CC volverá a tener voz propia en Madrid. Las cabezas pensantes de Coalición saben que, en ese escenario, el nacionalismo canario tenderá a desinflarse al mismo ritmo que se elevó cuando Olarte, Mauricio y Rivero subían al púlpito del Congreso para dialogar mano a mano con el presidente del Gobierno español.Esa situación explica que Rivero entone sin rubor el todos contra Madrid aunque para ello tengan que utilizar disculpas como la policía autonómica o la inmigración. Todos esos expedientes pasaron dormidos la anterior legislatura y ahora se afrontan sin «arrodillarse» ante el Estado.
Canarias7
Las señales que en las últimas semanas están llegando de los nuevos mandamás del Gobierno regional anuncian la vuelta a un discurso nacionalista que hacía años que no se pronunciaba en las Islas. Tanto Paulino Rivero como su mano derecha en el Ejecutivo canario, José Miguel Ruano, han echado mano de los ancestros de CC para volver a entonar el cántico antimetropolis típico de otros tiempos, cuando las comunidades autónomas nacían y había mucho que explicar a Madrid. Con la «mano tendida» pero también con «firmeza», juran y perjuran que Canarias «no se arrodillará» ante el Estado, Pero, ¿quién ha hablado de hincar la rodilla en el suelo?
Por el momento y a falta de que Madrid diga esta boca es mía, las amenazas de los nacionalistas suenan a poner la venda antes de la herida. Que se sepa, ningún representante del Gobierno español ha dado con la puerta en la cara a algún consejero del Ejecutivo presidido por Rivero. Que se sepa y exceptuando a Caldera (el responsable de Trabajo es siempre un punto y aparte), no hay ministro que se haya negado a cumplir algún acuerdo alcanzado con el Archipiélago.
En cambio, hay datos de otro tipo que podrían explicar en parte el grito nacionalista del presidente. El primero es evidente, aunque a alguno le duela recordarlo: CC ha perdido su grupo parlamentario en el Congreso y necesita una voz alternativa para demostrar que sigue existiendo. Sin megáfono en la capital, el Gobierno regional está obligado a convertirse en el pepito grillo del que tanto huyó en la anterior legislatura Adán Martín.
Entender el discurso reivindicativo adoptado en estos primeros compases por el Ejecutivo canario pasa también por recordar que hace meses que ningún ministro de Zapatero llama a la puerta de CC. Solbes está haciendo los presupuestos estatales del próximo año sin escuchar las reivindicaciones de los nacionalistas y eso, aunque a alguno le cueste reconocerlo, duele mucho a quienes se han llenado la boca durante años con lo que mandan en Madrid.
Tercer y definitivo ingrediente para componer el plato del cántico nacionalista: en marzo de 2008 hay elecciones generales. Con los resultados de los comicios autonómicos, resulta una quimera pensar en que CC volverá a tener voz propia en Madrid. Las cabezas pensantes de Coalición saben que, en ese escenario, el nacionalismo canario tenderá a desinflarse al mismo ritmo que se elevó cuando Olarte, Mauricio y Rivero subían al púlpito del Congreso para dialogar mano a mano con el presidente del Gobierno español.Esa situación explica que Rivero entone sin rubor el todos contra Madrid aunque para ello tengan que utilizar disculpas como la policía autonómica o la inmigración. Todos esos expedientes pasaron dormidos la anterior legislatura y ahora se afrontan sin «arrodillarse» ante el Estado.
lunes, 13 de agosto de 2007
INFORME DE CÁRITAS DIOCESANA
Cáritas Diocesana atendió en el año 2006 a 27.734 personas en la provincia tinerfeña y 11.658 en la provincia de Las Palmas. Esta organización ha detectado un aumento de la pobreza y un deterioro de la calidad de vida, sobre todo entre los mayores y la población infantil. José María Rivero Vargas, subdirector de Cáritas de Tenerife, explica a este periódico cómo los fenómenos de la pobreza y la exclusión social son una realidad cada vez más presente en el Archipiélago."El incremento de la pobreza en Canarias es sintomático, porque día a día constatamos que cada vez necesita ayuda más gente". Rivero encuentra los motivos de este aumento -que en el caso de la provincia tinerfeña fue de un 15% en el pasado año- en "la precariedad laboral y la subida de precios por la entrada del euro". Bajo su punto de vista, estas dos circunstancias hacen que las personas con menor poder adquisitivo se hayan quedado estancadas, siendo candidatos a caer en las redes de la pobreza. En este sentido, el responsable de Cáritas afirma que "en los últimos diez años, Canarias es de las comunidades autónomas que más ha crecido en términos de renta pero esto no se ha reflejado en la población". "Los que eran ricos hace diez años, hoy lo son más pero otros siguen creciendo en la pobreza".Con respecto al tema de la precariedad laboral, el subdirector declara que "el informe del Consejo Económico y Social de Canarias ha publicado que el 76% de los hogares canarios tienen serios problemas para llegar a fin de mes".Siendo el empleo una pieza fundamental para la integración social de una persona, durante el 2006 Cáritas ayudó a 1.073 jóvenes y adultos en su inserción laboral a través de cursos de formación y servicios de mediación para el empleo. En relación a estos proyectos tambien se ocupan de encontrar trabajo a inmigrantes irregulares. Rivero afirma que "estos viven unas circunstancias de las que se aprovechan empresarios sin escrúpulos para ofrecer trabajos mal remunerados y sin seguridad social". "Cáritas media con las empresas para conseguir un trato digno, en lo que tardamos de tres a seis meses, tiempo en el que los inmigrantes viven en casas propiedad de la entidad", explica Rivero también que la soledad no se puede medir sólo en términos económicos: la soledad y las enfermedas físicas y mentales agravan situaciones ya de por sí problemáticas. Rivero manifiesta que "en Canarias el colectivo más afectado por la pobreza son los mayores". "En las Islas hay unos 70.000 mayores que viven con menos de 456 euros al mes, otros viven con pensiones no contributivas que no superan los 300 euros". En este marco, los mayores que no cuentan con una familia o con los servicios sociales "no llegan a fin de mes". "Cáritas apuesta por un envejecimiento saludable, los mayores de 65 años son muy válidos y queremos que participen en la sociedad", considera Rivero. En centros de estancias diurnas y hogares o pisos tutelados de la organización, los mayores cuentan con talleres, gimnasio, fisioterapeutas, etc. con el fin de conseguir un envejecimiento sano y natural. Otro sector vulnerable de la sociedad son los niños. Según la Fundación para el Fomento de los Estudios Sociales y Sociología Avanzada (FOESSA), el 25% de la población infantil española vive por debajo del umbral de la pobreza (con menos de 456 euros al mes), pero en el caso de Canarias este porcentaje asciende hasta el 28%. Esta diferencia entre las Islas y el resto del Estado es justificada por Rivero en el hecho de que en el Archipiélago hay un porcentaje considerable de familias desestructuradas, además de unidades monoparentales cuya cabeza de familia es una mujer que habitualmente desempeña trabajos poco remunerados.
Cáritas Diocesana, ante el reciente cambio de Gobierno en Canarias, tiene la esperanza de "conseguir mejores políticas", por lo que pide al Ejecutivo que se "siente con las organizaciones de carácter social". "Tenemos mucha experiencia y estamos dispuestos a apoyarlo", señala. Con respecto a las políticas sociales, el representante de Cáritas en Tenerife estima que "se han dado algunos pasos importantes como la Ley de Dependencia a nivel nacional o la Ley de Rentas Mínimas del Gobierno autonómico, pero todavía faltan medidas como la dotación de recursos específicos para colectivos desfavorecidos y políticas integrales que mejoren las cuantías económicas, a la vez que la inserción en el mercado laboral o la incorporación a la vivienda".
Cáritas Diocesana, ante el reciente cambio de Gobierno en Canarias, tiene la esperanza de "conseguir mejores políticas", por lo que pide al Ejecutivo que se "siente con las organizaciones de carácter social". "Tenemos mucha experiencia y estamos dispuestos a apoyarlo", señala. Con respecto a las políticas sociales, el representante de Cáritas en Tenerife estima que "se han dado algunos pasos importantes como la Ley de Dependencia a nivel nacional o la Ley de Rentas Mínimas del Gobierno autonómico, pero todavía faltan medidas como la dotación de recursos específicos para colectivos desfavorecidos y políticas integrales que mejoren las cuantías económicas, a la vez que la inserción en el mercado laboral o la incorporación a la vivienda".
lunes, 6 de agosto de 2007
LOS VECINOS DE FATAGA EMPRENDEN POR SU CUENTA LA RECONSTRUCCIÓN DE SUS CASAS
M. REYES / SAN BARTOLOMÉ DE TIRAJANA
Los vecinos de Fataga ya han comenzado al golpito la reconstrucción de este pueblo del municipio de San Bartolomé de Tirajana, convirtiendo sus caminos y terrenos en un improvisado campo de reparaciones, aunque la prioridad todavía sigue en limpiar el hollín de las casas y tirar los enseres quemados."Me pregunto dónde está el personal del Ayuntamiento", se interroga casi para sus adentros Ignacio Rodríguez, un lugareño que lleva todo el fin de semana dando viajes hasta el viejo campo de fútbol para vaciar un pequeño transporte con el que recoge la basura y el mobiliario chamuscado puerta a puerta. Y es que los medios materiales puestos a disposición de los afectados por el incendio que ha asolado la cumbre de Gran Canaria son casi inexistentes, con contadas excepciones como la del citado transportín. "Aquí los políticos sólo vienen a hacerse la foto", añade José Rodríguez, otro vecino que trabaja a destajo en acondicionar el pueblo mientras el Cabildo Insular entrega las primeras ayudas a los damnificados.Todos arriman el hombro para eliminar "la imagen negra" que percibe el turista cuando pisa Fataga, pero las principales actuaciones se concentran en reparar los conductos del agua para "salvar los cultivos que han escapado de las llamas", un improvisado mosaico de fontaneros que encuentra su máxima expresión en Ángel Mejías. "Llevo toda la mañana cambiando los hidros quemados de las casas para que puedan tener agua", explica este vecino mientras se toma un respiro y deja de darle vueltas a la llave inglesa.SIN ESCAQUEOS. Más abajo, en otra casa pegada a las palmeras calcinadas del barranco, una familia se esmera en limpiar sus terrenos repletos de cenizas. Nadie se escaquea. La abuela recoge los restos de lo que fue un aguacatero con los sempiternos guantes de color rosa, y el nieto brinca sobre los desechos para compactar el espacio. Todos participan en levantar esta especie de luto que flota en el valle. "Miro la montaña y es como si sintiera que alguien ha muerto", sostiene María del Carmen García, al tiempo que limpia lo que queda de su huerto.Arriba, en la esquina con la plaza, una montaña de tejas, bidones y antenas retorcidas por las llamas crece sin cesar. Son de Miguel Ángel Cazorla, que está tiznado de arriba abajo tras una dura jornada en la que ha estado poniendo orden en el techo de su casa canaria. Y de ahí al viejo campo de fútbol.
Los vecinos de Fataga ya han comenzado al golpito la reconstrucción de este pueblo del municipio de San Bartolomé de Tirajana, convirtiendo sus caminos y terrenos en un improvisado campo de reparaciones, aunque la prioridad todavía sigue en limpiar el hollín de las casas y tirar los enseres quemados."Me pregunto dónde está el personal del Ayuntamiento", se interroga casi para sus adentros Ignacio Rodríguez, un lugareño que lleva todo el fin de semana dando viajes hasta el viejo campo de fútbol para vaciar un pequeño transporte con el que recoge la basura y el mobiliario chamuscado puerta a puerta. Y es que los medios materiales puestos a disposición de los afectados por el incendio que ha asolado la cumbre de Gran Canaria son casi inexistentes, con contadas excepciones como la del citado transportín. "Aquí los políticos sólo vienen a hacerse la foto", añade José Rodríguez, otro vecino que trabaja a destajo en acondicionar el pueblo mientras el Cabildo Insular entrega las primeras ayudas a los damnificados.Todos arriman el hombro para eliminar "la imagen negra" que percibe el turista cuando pisa Fataga, pero las principales actuaciones se concentran en reparar los conductos del agua para "salvar los cultivos que han escapado de las llamas", un improvisado mosaico de fontaneros que encuentra su máxima expresión en Ángel Mejías. "Llevo toda la mañana cambiando los hidros quemados de las casas para que puedan tener agua", explica este vecino mientras se toma un respiro y deja de darle vueltas a la llave inglesa.SIN ESCAQUEOS. Más abajo, en otra casa pegada a las palmeras calcinadas del barranco, una familia se esmera en limpiar sus terrenos repletos de cenizas. Nadie se escaquea. La abuela recoge los restos de lo que fue un aguacatero con los sempiternos guantes de color rosa, y el nieto brinca sobre los desechos para compactar el espacio. Todos participan en levantar esta especie de luto que flota en el valle. "Miro la montaña y es como si sintiera que alguien ha muerto", sostiene María del Carmen García, al tiempo que limpia lo que queda de su huerto.Arriba, en la esquina con la plaza, una montaña de tejas, bidones y antenas retorcidas por las llamas crece sin cesar. Son de Miguel Ángel Cazorla, que está tiznado de arriba abajo tras una dura jornada en la que ha estado poniendo orden en el techo de su casa canaria. Y de ahí al viejo campo de fútbol.
miércoles, 1 de agosto de 2007
“LA SANIDAD PÚBLICA ESTÁ FINANCIANDO LA TECNOLOGÍA DE LA SANIDAD PRIVADA”
Entrevista a Domingo Cortón Lamelas. Un profesional de la medicina, el Dr. Domingo Cortón Lamelas, cirujano pediátrico del Hospital universitario Nuestra Señora de Candelaria, y miembro de un colectivo que recientemente ha formulado un Manifiesto por la Sanidad Pública Canaria.
JM CASTELLANO
- ¿Cuáles son a su juicio los principales problemas del sistema sanitario canario?En primer lugar, los médicos de atención primaria sólo pueden dedicar a sus pacientes un par de minutos. Y como no disponen de tiempo para atenderlos adecuadamente son enviados al especialista, con lo que se genera una sobrecarga en los hospitales. En segundo lugar, está la estructura hospitalaria. Cuando me incorporé al Servicio de Cirugía Pediatra de La Candelaria éramos seis profesionales. Hoy, veinte años después, con un incremento poblacional significativo resulta que el número de cirujanos pediátricos en el Servicio no ha variado. Por tanto, ya tenemos otra explicación que ayuda a entender las listas de espera: aumenta el número de pacientes pero no se incrementa el número de facultativos. Y en tercer lugar, la dirección de los centros hospitalarios no está en manos de profesionales sino de médicos con una calificación muy buena y con un reconocimiento profesional alto pero no son gestores cualificados.
- Estos son los problemas pero cuáles serían las posibles alternativasEstructurar la sanidad de acuerdo a su importancia. Necesitamos una medicina preventiva mucho más fuerte e implantar la educación sanitaria en la escuela, porque la higiene personal, la alimentación, la salud, el sueño, el descanso de las personas a la larga repercutirá en un mejor estado de salud. Segundo, estructurar la sanidad por orden de gravedad. No necesitamos grandes centros hospitalarios con un coste enorme sino estructuras sanitarias cercanas a la población y que solucionen los problemas inmediatos. En estos momentos, los hospitales de tercer nivel dedican más del 50% de su tiempo a tratamiento de pacientes que pueden ser tratados perfectamente en hospitales de primer nivel, en hospitales comarcales. Se tiene que cambiar toda la estructura. Mientras no se disponga de este tipo de centros estaremos sobrecargando la red de asistencia y aumentando el coste de la sanidad. Evidentemente la descentralización de la sanidad es urgente a todos los niveles.
¿Considera que están bien utilizados los recursos hospitalarios?Un hospital como el de La Candelaria dispone de 18 quirófanos que sólo se emplean por las mañanas. ¿Qué pasa por las tardes y por las noches? Una empresa con exceso de demanda pondría turnos. Sin embargo, dejamos parados un montón de recursos en tecnología punta durante dieciséis horas diarias.
¿Y los recursos humanos?La Administración en vez de contratar a más médicos utiliza el personal de plantilla a través de sistema de horas extras. Esa es la solución que ofrece para las listas de espera. Sin embargo un grupo que trabaje en un quirófano dos tardes tiene el mismo gasto de personal que si se contratara al mismo número de persona durante todo el mes ¿Cómo puede entenderse eso?
¿Cuál es el motivo del déficit de especialistas en Canarias?Canarias no es capaz de cubrir la necesidad que tiene de especialistas, por tanto necesita traer especialistas de otras comunidades autónomas. Pero ¿cómo podemos traer especialista cuando estamos ofreciendo contratos basura? Contratos que en muchas ocasiones llegan a ser de una semana, de un día o de unas horas. Este es otro de los problemas de la sanidad, el déficit de especialistas motivado por no ofrecer contratos en condiciones adecuadas. Y esto hace que prolifere la medicina privada
¿Por qué? Porque la medicina pública con el sistema que tiene de contrato no puede hacer frente a las necesidades de la población. Solución de la Administración: clínicas concertadas y paso de enfermos de la pública a la privada, con lo que se demuestra claramente una voluntad política de privatizar la sanidad, porque en sus manos tiene la solución al problema, pero no quiere afrontarlo.- Sin embargo, a pesar de la situación actual o quizás justamente por esa misma situación, la sanidad parece haberse convertido en estos últimos años en un sector de gran interés para la inversión privada en las islasSi claro, lo estamos viendo. Si una empresa constructora como ACS se permite el lujo de comprar la Clínica Parque, no podemos pensar que son las hermanitas de la caridad. Si invierten en una clínica de salud es que están invirtiendo para obtener beneficios.
- ¿Por qué cree Ud. que se ha fomentado en Canarias considerablemente la sanidad privada en estos últimos años?La sanidad privada en Canarias está muy concentrada en determinadas manos y cuentan con un gran poder político y económico.
- Entonces, el incremento de los conciertos con los centros privados puede entenderse como un paso previo a la privatizaciónEs evidente que la sanidad pública está financiando la tecnología de la sanidad privada. En este año, por ejemplo, las transferencias, es decir, el dinero que se ha destinado a aumentar los conciertos con la sanidad privada se acerca a diez veces más que en la pública. La política sanitaria canaria va hacia una privatización encubierta. Y se basa en un principio básico del capitalismo: en que el sector privado siempre es más productivo o más rentable que el sector público. Y eso, es una gran falacia porque no se mide con los mismos parámetros y exigencias de calidad al sector privado que al sector público.
- En qué se manifiestan esos contrastes calidad entre la sanidad publica-privadaBasta comparar cómo se reparten el número de sanitarios en la sanidad pública y en la privada, el número de enfermeras por cama, el número de auxiliares por cama, etc. El sector privado necesita rentabilizar, es decir, que la medicina sea un negocio. Mientras que el sector público no necesita funcionar con ese parámetro. Estoy convencido que un tanto por ciento elevado de las operaciones que se realizan en el sector privado se realiza con un cirujano, mientras que la misma patología en el sector público cuenta con dos cirujanos; por otro lado, al sector público se le exige una cantidad de enfermeras determinadas por camas; asimismo los sindicatos en el sector privado tienen muy poca implantación y, por tanto, muy poca fuerza y los empresarios pueden apretar sobre aquellas capas de trabajadores con menos posibilidades de recolocación y tirando siempre los sueldos a la baja y exigiendo, además, un tipo de comportamiento y de trabajo que muchas veces exceden sus funciones, es decir, auxiliares haciendo funciones de enfermeras, enfermeras llevando más camas de las que son capaces y realizando funciones que no les corresponden.
- ¿La sanidad es igual para todos?No. No es igual porque tampoco es igual la enfermedad. Está más que demostrado que la tecnología punta no llega a la vez a todos los estratos sociales. Nosotros vemos que cuando se implantan nuevas tecnologías los primeros que tienen acceso a ellas van muy marcados por la relación socioeconómica o sociocultural del paciente. Lo que es evidente es que el acceso a la sanidad, a pesar de lo que pensemos, no es exactamente igual para todos.- La sanidad se convierte siempre en punto estrella en las campañas electorales. ¿Cuál es su valoración?La crisis de la sanidad no se acaba con la promesas de los políticos. La crisis de la sanidad acaba si repensamos la sanidad pública y replanteamos una sanidad distinta. Si no, lo único que haremos será poner parches, es decir, las listas de espera seguirán siempre y los problemas que tenemos de salud los seguiremos teniendo de forma indefinida. Creo que debemos replantearnos una sanidad distinta. Mientras los políticos sigan utilizando ese slogan de que “hemos operado más”, en vez de decir “hemos necesitado operar menos” invirtiendo para obtener beneficios.
- ¿Por qué cree Ud. que se ha fomentado en Canarias considerablemente la sanidad privada en estos últimos años?La sanidad privada en Canarias está muy concentrada en determinadas manos y cuentan con un gran poder político y económico.
- Entonces, el incremento de los conciertos con los centros privados puede entenderse como un paso previo a la privatizaciónEs evidente que la sanidad pública está financiando la tecnología de la sanidad privada. En este año, por ejemplo, las transferencias, es decir, el dinero que se ha destinado a aumentar los conciertos con la sanidad privada se acerca a diez veces más que en la pública. La política sanitaria canaria va hacia una privatización encubierta. Y se basa en un principio básico del capitalismo: en que el sector privado siempre es más productivo o más rentable que el sector público. Y eso, es una gran falacia porque no se mide con los mismos parámetros y exigencias de calidad al sector privado que al sector público.
- En qué se manifiestan esos contrastes calidad entre la sanidad publica-privadaBasta comparar cómo se reparten el número de sanitarios en la sanidad pública y en la privada, el número de enfermeras por cama, el número de auxiliares por cama, etc. El sector privado necesita rentabilizar, es decir, que la medicina sea un negocio. Mientras que el sector público no necesita funcionar con ese parámetro. Estoy convencido que un tanto por ciento elevado de las operaciones que se realizan en el sector privado se realiza con un cirujano, mientras que la misma patología en el sector público cuenta con dos cirujanos; por otro lado, al sector público se le exige una cantidad de enfermeras determinadas por camas; asimismo los sindicatos en el sector privado tienen muy poca implantación y, por tanto, muy poca fuerza y los empresarios pueden apretar sobre aquellas capas de trabajadores con menos posibilidades de recolocación y tirando siempre los sueldos a la baja y exigiendo, además, un tipo de comportamiento y de trabajo que muchas veces exceden sus funciones, es decir, auxiliares haciendo funciones de enfermeras, enfermeras llevando más camas de las que son capaces y realizando funciones que no les corresponden.
- ¿La sanidad es igual para todos?No. No es igual porque tampoco es igual la enfermedad. Está más que demostrado que la tecnología punta no llega a la vez a todos los estratos sociales. Nosotros vemos que cuando se implantan nuevas tecnologías los primeros que tienen acceso a ellas van muy marcados por la relación socioeconómica o sociocultural del paciente. Lo que es evidente es que el acceso a la sanidad, a pesar de lo que pensemos, no es exactamente igual para todos.- La sanidad se convierte siempre en punto estrella en las campañas electorales. ¿Cuál es su valoración?La crisis de la sanidad no se acaba con la promesas de los políticos. La crisis de la sanidad acaba si repensamos la sanidad pública y replanteamos una sanidad distinta. Si no, lo único que haremos será poner parches, es decir, las listas de espera seguirán siempre y los problemas que tenemos de salud los seguiremos teniendo de forma indefinida. Creo que debemos replantearnos una sanidad distinta. Mientras los políticos sigan utilizando ese slogan de que “hemos operado más”, en vez de decir “hemos necesitado operar menos” invirtiendo para obtener beneficios.
- ¿Por qué cree Ud. que se ha fomentado en Canarias considerablemente la sanidad privada en estos últimos años?La sanidad privada en Canarias está muy concentrada en determinadas manos y cuentan con un gran poder político y económico.
- Entonces, el incremento de los conciertos con los centros privados puede entenderse como un paso previo a la privatizaciónEs evidente que la sanidad pública está financiando la tecnología de la sanidad privada. En este año, por ejemplo, las transferencias, es decir, el dinero que se ha destinado a aumentar los conciertos con la sanidad privada se acerca a diez veces más que en la pública. La política sanitaria canaria va hacia una privatización encubierta. Y se basa en un principio básico del capitalismo: en que el sector privado siempre es más productivo o más rentable que el sector público. Y eso, es una gran falacia porque no se mide con los mismos parámetros y exigencias de calidad al sector privado que al sector público.
- En qué se manifiestan esos contrastes calidad entre la sanidad publica-privadaBasta comparar cómo se reparten el número de sanitarios en la sanidad pública y en la privada, el número de enfermeras por cama, el número de auxiliares por cama, etc. El sector privado necesita rentabilizar, es decir, que la medicina sea un negocio. Mientras que el sector público no necesita funcionar con ese parámetro. Estoy convencido que un tanto por ciento elevado de las operaciones que se realizan en el sector privado se realiza con un cirujano, mientras que la misma patología en el sector público cuenta con dos cirujanos; por otro lado, al sector público se le exige una cantidad de enfermeras determinadas por camas; asimismo los sindicatos en el sector privado tienen muy poca implantación y, por tanto, muy poca fuerza y los empresarios pueden apretar sobre aquellas capas de trabajadores con menos posibilidades de recolocación y tirando siempre los sueldos a la baja y exigiendo, además, un tipo de comportamiento y de trabajo que muchas veces exceden sus funciones, es decir, auxiliares haciendo funciones de enfermeras, enfermeras llevando más camas de las que son capaces y realizando funciones que no les corresponden.
- ¿La sanidad es igual para todos?No. No es igual porque tampoco es igual la enfermedad. Está más que demostrado que la tecnología punta no llega a la vez a todos los estratos sociales. Nosotros vemos que cuando se implantan nuevas tecnologías los primeros que tienen acceso a ellas van muy marcados por la relación socioeconómica o sociocultural del paciente. Lo que es evidente es que el acceso a la sanidad, a pesar de lo que pensemos, no es exactamente igual para todos.- La sanidad se convierte siempre en punto estrella en las campañas electorales. ¿Cuál es su valoración?La crisis de la sanidad no se acaba con la promesas de los políticos. La crisis de la sanidad acaba si repensamos la sanidad pública y replanteamos una sanidad distinta. Si no, lo único que haremos será poner parches, es decir, las listas de espera seguirán siempre y los problemas que tenemos de salud los seguiremos teniendo de forma indefinida. Creo que debemos replantearnos una sanidad distinta. Mientras los políticos sigan utilizando ese slogan de que “hemos operado más”, en vez de decir “hemos necesitado operar menos” porque hay menos enfermos con esa patología, la sanidad seguirá sin funcionar. En Canarias se presume del número de trasplantes renales, en vez de trabajar por disminuir la diabetes, los problemas cardiacos, vasculares, etc. Mientras no pasemos de “lo mucho que hemos curado” a “lo mucho que hemos prevenido tener que curar”, mientras que no lleguemos a esa conclusión, la sanidad seguirá sin funcionar.
- Desde algunas instancias se ha alarmado a la población con la introducción de enfermedades con la llegada de inmigrantesNormalmente emigran los mejores, los más sanos, los más aptos, estas personas tienen una selección natural. No creo que deba ser un motivo de alarma.
- También se ha culpabilizado al emigrante de sobrecargar el gasto sanitarioEl gasto sanitario de los emigrantes en Canarias representa el 0.3% del dinero destinado a sanidad. Mientras que el emigrante repercute en el Producto Interior Bruto aproximadamente en un 4%. No es verdad, por tanto, que la emigración repercute produciendo una sobrecarga en la sanidad. Además los emigrantes usan muchísimo menos la sanidad que otras personas de la comunidad. Se da el caso curioso de que incluso los emigrantes en situación legal son cinco veces menos demandantes de sanidad que cualquier otro ciudadano.
- ¿Por qué existe una sanidad pública y no se ha socializado la farmacia?Esa pregunta me la he hecho en muchas ocasiones. No llego a entender por que los hospitales cuentan con un departamento de farmacia y no existe ese mismo departamento en los Centros de Salud. Pero claro, en el circuito comercial de los medicamentos las farmacias se llevan el 30% del coste del producto, el mayorista se lleva el 12% del coste del producto y el Estado destina a los laboratorios el 16% de los beneficios para que sean invertidos en la formación continuada de los médicos. De este modo, vemos como el 58% del precio de un medicamento va a parar a intermediarios. ¿Por qué un colectivo que no llega a mil personas en Canarias, como son los farmacéuticos, tiene esas prebendas? ¿Por qué no se pueden establecer farmacias unas al lado de otras? ¿Por qué este colectivo tiene la fuerza de imponer un sistema determinado de venta de productos? ¿Por qué no se establecen oficinas de farmacia en cada Centro de Salud? En estos momentos el paciente aporta el 40% del precio del medicamento, pues bien, si nos ahorráramos ese 58% de intermediación podríamos permitirnos el lujo de no cobrar un solo céntimo con lo que mejoraría además la financiación.- En un reciente informe sobre corrupción sanitaria el catedrático Manuel Villoria señalaba que las industrias farmacéuticas destinan entre un 25% y un 40% de sus recursos a promocionar sus productos e influir en las decisiones de los médicos. Hace algunos años se pretendió combatir sin éxito el hecho de que los laboratorios primaran a los médicos con inscripciones a congresos, regalos, viajes de vacaciones, bolsas de viajes, etc. Recientemente el director general de Farmacia del gobierno de Canarias justificaba esa práctica al corresponder a los laboratorios la formación continuada de los médicos. Pero de alguna manera esa relación sirve para controlar a los médicos, ya que los laboratorios invierten en los que recetan sus productos, por lo tanto aquellos otros que no recetan por razón de su condición, por ejemplo médicos de medicina preventiva, de determinada áreas de la cirugía, no cuentan con financiación para su formación al no ser rentables para los laboratorios. Y en esto no se ha parado a pensar la Administración. Que quede claro que no estoy proponiendo que los laboratorios tengan que prestarles ayuda sino que ese dinero, que la Administración le permite manejar a los laboratorios, debería ser gestionado por la propia Administración. Si la formación continuada pasa por manos de los laboratorios, de alguna manera los laboratorios ejercen una presión sobre los médicos a la hora de recetar.
- Ud. forma parte de un equipo de profesionales que recientemente ha presentado un Manifiesto por la Sanidad Pública Canaria ¿Cuáles son las líneas maestras de ese documento?La necesidad de nuevas inversiones; la introducción de cambios estructurales; la descentralización; la potenciación de las áreas primarias, de los centros de salud, hospitales y clínicas de primer y segundo nivel; la inclusión de la educación y prevención sanitaria en la enseñanza Primaria y Secundaria; el establecimiento de verdaderas políticas de recursos humanos; incentivar adecuadamente a los profesionales sanitarios; políticas de personal que conduzcan a que todos los trabajadores tanto del sector público como del sector privado, tengan los mismos derechos y obligaciones; establecimiento de programa de formación continuada; profesionalización de los gestores sanitarios, separando la responsabilidad política de la administrativa; delimitación del sector privado, con una política coherente de conciertos para evitar la descapitalización del sector publico y la financiación tecnológica encubierta de los centros privados y para garantizar la calidad de sus tratamientos; acreditación periódica de los centros y empresas privadas con los que el sector publico ha establecido conciertos, exigiéndoseles los mismos parámetros de calidad que al sector publico, etc.
JM CASTELLANO
- ¿Cuáles son a su juicio los principales problemas del sistema sanitario canario?En primer lugar, los médicos de atención primaria sólo pueden dedicar a sus pacientes un par de minutos. Y como no disponen de tiempo para atenderlos adecuadamente son enviados al especialista, con lo que se genera una sobrecarga en los hospitales. En segundo lugar, está la estructura hospitalaria. Cuando me incorporé al Servicio de Cirugía Pediatra de La Candelaria éramos seis profesionales. Hoy, veinte años después, con un incremento poblacional significativo resulta que el número de cirujanos pediátricos en el Servicio no ha variado. Por tanto, ya tenemos otra explicación que ayuda a entender las listas de espera: aumenta el número de pacientes pero no se incrementa el número de facultativos. Y en tercer lugar, la dirección de los centros hospitalarios no está en manos de profesionales sino de médicos con una calificación muy buena y con un reconocimiento profesional alto pero no son gestores cualificados.
- Estos son los problemas pero cuáles serían las posibles alternativasEstructurar la sanidad de acuerdo a su importancia. Necesitamos una medicina preventiva mucho más fuerte e implantar la educación sanitaria en la escuela, porque la higiene personal, la alimentación, la salud, el sueño, el descanso de las personas a la larga repercutirá en un mejor estado de salud. Segundo, estructurar la sanidad por orden de gravedad. No necesitamos grandes centros hospitalarios con un coste enorme sino estructuras sanitarias cercanas a la población y que solucionen los problemas inmediatos. En estos momentos, los hospitales de tercer nivel dedican más del 50% de su tiempo a tratamiento de pacientes que pueden ser tratados perfectamente en hospitales de primer nivel, en hospitales comarcales. Se tiene que cambiar toda la estructura. Mientras no se disponga de este tipo de centros estaremos sobrecargando la red de asistencia y aumentando el coste de la sanidad. Evidentemente la descentralización de la sanidad es urgente a todos los niveles.
¿Considera que están bien utilizados los recursos hospitalarios?Un hospital como el de La Candelaria dispone de 18 quirófanos que sólo se emplean por las mañanas. ¿Qué pasa por las tardes y por las noches? Una empresa con exceso de demanda pondría turnos. Sin embargo, dejamos parados un montón de recursos en tecnología punta durante dieciséis horas diarias.
¿Y los recursos humanos?La Administración en vez de contratar a más médicos utiliza el personal de plantilla a través de sistema de horas extras. Esa es la solución que ofrece para las listas de espera. Sin embargo un grupo que trabaje en un quirófano dos tardes tiene el mismo gasto de personal que si se contratara al mismo número de persona durante todo el mes ¿Cómo puede entenderse eso?
¿Cuál es el motivo del déficit de especialistas en Canarias?Canarias no es capaz de cubrir la necesidad que tiene de especialistas, por tanto necesita traer especialistas de otras comunidades autónomas. Pero ¿cómo podemos traer especialista cuando estamos ofreciendo contratos basura? Contratos que en muchas ocasiones llegan a ser de una semana, de un día o de unas horas. Este es otro de los problemas de la sanidad, el déficit de especialistas motivado por no ofrecer contratos en condiciones adecuadas. Y esto hace que prolifere la medicina privada
¿Por qué? Porque la medicina pública con el sistema que tiene de contrato no puede hacer frente a las necesidades de la población. Solución de la Administración: clínicas concertadas y paso de enfermos de la pública a la privada, con lo que se demuestra claramente una voluntad política de privatizar la sanidad, porque en sus manos tiene la solución al problema, pero no quiere afrontarlo.- Sin embargo, a pesar de la situación actual o quizás justamente por esa misma situación, la sanidad parece haberse convertido en estos últimos años en un sector de gran interés para la inversión privada en las islasSi claro, lo estamos viendo. Si una empresa constructora como ACS se permite el lujo de comprar la Clínica Parque, no podemos pensar que son las hermanitas de la caridad. Si invierten en una clínica de salud es que están invirtiendo para obtener beneficios.
- ¿Por qué cree Ud. que se ha fomentado en Canarias considerablemente la sanidad privada en estos últimos años?La sanidad privada en Canarias está muy concentrada en determinadas manos y cuentan con un gran poder político y económico.
- Entonces, el incremento de los conciertos con los centros privados puede entenderse como un paso previo a la privatizaciónEs evidente que la sanidad pública está financiando la tecnología de la sanidad privada. En este año, por ejemplo, las transferencias, es decir, el dinero que se ha destinado a aumentar los conciertos con la sanidad privada se acerca a diez veces más que en la pública. La política sanitaria canaria va hacia una privatización encubierta. Y se basa en un principio básico del capitalismo: en que el sector privado siempre es más productivo o más rentable que el sector público. Y eso, es una gran falacia porque no se mide con los mismos parámetros y exigencias de calidad al sector privado que al sector público.
- En qué se manifiestan esos contrastes calidad entre la sanidad publica-privadaBasta comparar cómo se reparten el número de sanitarios en la sanidad pública y en la privada, el número de enfermeras por cama, el número de auxiliares por cama, etc. El sector privado necesita rentabilizar, es decir, que la medicina sea un negocio. Mientras que el sector público no necesita funcionar con ese parámetro. Estoy convencido que un tanto por ciento elevado de las operaciones que se realizan en el sector privado se realiza con un cirujano, mientras que la misma patología en el sector público cuenta con dos cirujanos; por otro lado, al sector público se le exige una cantidad de enfermeras determinadas por camas; asimismo los sindicatos en el sector privado tienen muy poca implantación y, por tanto, muy poca fuerza y los empresarios pueden apretar sobre aquellas capas de trabajadores con menos posibilidades de recolocación y tirando siempre los sueldos a la baja y exigiendo, además, un tipo de comportamiento y de trabajo que muchas veces exceden sus funciones, es decir, auxiliares haciendo funciones de enfermeras, enfermeras llevando más camas de las que son capaces y realizando funciones que no les corresponden.
- ¿La sanidad es igual para todos?No. No es igual porque tampoco es igual la enfermedad. Está más que demostrado que la tecnología punta no llega a la vez a todos los estratos sociales. Nosotros vemos que cuando se implantan nuevas tecnologías los primeros que tienen acceso a ellas van muy marcados por la relación socioeconómica o sociocultural del paciente. Lo que es evidente es que el acceso a la sanidad, a pesar de lo que pensemos, no es exactamente igual para todos.- La sanidad se convierte siempre en punto estrella en las campañas electorales. ¿Cuál es su valoración?La crisis de la sanidad no se acaba con la promesas de los políticos. La crisis de la sanidad acaba si repensamos la sanidad pública y replanteamos una sanidad distinta. Si no, lo único que haremos será poner parches, es decir, las listas de espera seguirán siempre y los problemas que tenemos de salud los seguiremos teniendo de forma indefinida. Creo que debemos replantearnos una sanidad distinta. Mientras los políticos sigan utilizando ese slogan de que “hemos operado más”, en vez de decir “hemos necesitado operar menos” invirtiendo para obtener beneficios.
- ¿Por qué cree Ud. que se ha fomentado en Canarias considerablemente la sanidad privada en estos últimos años?La sanidad privada en Canarias está muy concentrada en determinadas manos y cuentan con un gran poder político y económico.
- Entonces, el incremento de los conciertos con los centros privados puede entenderse como un paso previo a la privatizaciónEs evidente que la sanidad pública está financiando la tecnología de la sanidad privada. En este año, por ejemplo, las transferencias, es decir, el dinero que se ha destinado a aumentar los conciertos con la sanidad privada se acerca a diez veces más que en la pública. La política sanitaria canaria va hacia una privatización encubierta. Y se basa en un principio básico del capitalismo: en que el sector privado siempre es más productivo o más rentable que el sector público. Y eso, es una gran falacia porque no se mide con los mismos parámetros y exigencias de calidad al sector privado que al sector público.
- En qué se manifiestan esos contrastes calidad entre la sanidad publica-privadaBasta comparar cómo se reparten el número de sanitarios en la sanidad pública y en la privada, el número de enfermeras por cama, el número de auxiliares por cama, etc. El sector privado necesita rentabilizar, es decir, que la medicina sea un negocio. Mientras que el sector público no necesita funcionar con ese parámetro. Estoy convencido que un tanto por ciento elevado de las operaciones que se realizan en el sector privado se realiza con un cirujano, mientras que la misma patología en el sector público cuenta con dos cirujanos; por otro lado, al sector público se le exige una cantidad de enfermeras determinadas por camas; asimismo los sindicatos en el sector privado tienen muy poca implantación y, por tanto, muy poca fuerza y los empresarios pueden apretar sobre aquellas capas de trabajadores con menos posibilidades de recolocación y tirando siempre los sueldos a la baja y exigiendo, además, un tipo de comportamiento y de trabajo que muchas veces exceden sus funciones, es decir, auxiliares haciendo funciones de enfermeras, enfermeras llevando más camas de las que son capaces y realizando funciones que no les corresponden.
- ¿La sanidad es igual para todos?No. No es igual porque tampoco es igual la enfermedad. Está más que demostrado que la tecnología punta no llega a la vez a todos los estratos sociales. Nosotros vemos que cuando se implantan nuevas tecnologías los primeros que tienen acceso a ellas van muy marcados por la relación socioeconómica o sociocultural del paciente. Lo que es evidente es que el acceso a la sanidad, a pesar de lo que pensemos, no es exactamente igual para todos.- La sanidad se convierte siempre en punto estrella en las campañas electorales. ¿Cuál es su valoración?La crisis de la sanidad no se acaba con la promesas de los políticos. La crisis de la sanidad acaba si repensamos la sanidad pública y replanteamos una sanidad distinta. Si no, lo único que haremos será poner parches, es decir, las listas de espera seguirán siempre y los problemas que tenemos de salud los seguiremos teniendo de forma indefinida. Creo que debemos replantearnos una sanidad distinta. Mientras los políticos sigan utilizando ese slogan de que “hemos operado más”, en vez de decir “hemos necesitado operar menos” invirtiendo para obtener beneficios.
- ¿Por qué cree Ud. que se ha fomentado en Canarias considerablemente la sanidad privada en estos últimos años?La sanidad privada en Canarias está muy concentrada en determinadas manos y cuentan con un gran poder político y económico.
- Entonces, el incremento de los conciertos con los centros privados puede entenderse como un paso previo a la privatizaciónEs evidente que la sanidad pública está financiando la tecnología de la sanidad privada. En este año, por ejemplo, las transferencias, es decir, el dinero que se ha destinado a aumentar los conciertos con la sanidad privada se acerca a diez veces más que en la pública. La política sanitaria canaria va hacia una privatización encubierta. Y se basa en un principio básico del capitalismo: en que el sector privado siempre es más productivo o más rentable que el sector público. Y eso, es una gran falacia porque no se mide con los mismos parámetros y exigencias de calidad al sector privado que al sector público.
- En qué se manifiestan esos contrastes calidad entre la sanidad publica-privadaBasta comparar cómo se reparten el número de sanitarios en la sanidad pública y en la privada, el número de enfermeras por cama, el número de auxiliares por cama, etc. El sector privado necesita rentabilizar, es decir, que la medicina sea un negocio. Mientras que el sector público no necesita funcionar con ese parámetro. Estoy convencido que un tanto por ciento elevado de las operaciones que se realizan en el sector privado se realiza con un cirujano, mientras que la misma patología en el sector público cuenta con dos cirujanos; por otro lado, al sector público se le exige una cantidad de enfermeras determinadas por camas; asimismo los sindicatos en el sector privado tienen muy poca implantación y, por tanto, muy poca fuerza y los empresarios pueden apretar sobre aquellas capas de trabajadores con menos posibilidades de recolocación y tirando siempre los sueldos a la baja y exigiendo, además, un tipo de comportamiento y de trabajo que muchas veces exceden sus funciones, es decir, auxiliares haciendo funciones de enfermeras, enfermeras llevando más camas de las que son capaces y realizando funciones que no les corresponden.
- ¿La sanidad es igual para todos?No. No es igual porque tampoco es igual la enfermedad. Está más que demostrado que la tecnología punta no llega a la vez a todos los estratos sociales. Nosotros vemos que cuando se implantan nuevas tecnologías los primeros que tienen acceso a ellas van muy marcados por la relación socioeconómica o sociocultural del paciente. Lo que es evidente es que el acceso a la sanidad, a pesar de lo que pensemos, no es exactamente igual para todos.- La sanidad se convierte siempre en punto estrella en las campañas electorales. ¿Cuál es su valoración?La crisis de la sanidad no se acaba con la promesas de los políticos. La crisis de la sanidad acaba si repensamos la sanidad pública y replanteamos una sanidad distinta. Si no, lo único que haremos será poner parches, es decir, las listas de espera seguirán siempre y los problemas que tenemos de salud los seguiremos teniendo de forma indefinida. Creo que debemos replantearnos una sanidad distinta. Mientras los políticos sigan utilizando ese slogan de que “hemos operado más”, en vez de decir “hemos necesitado operar menos” porque hay menos enfermos con esa patología, la sanidad seguirá sin funcionar. En Canarias se presume del número de trasplantes renales, en vez de trabajar por disminuir la diabetes, los problemas cardiacos, vasculares, etc. Mientras no pasemos de “lo mucho que hemos curado” a “lo mucho que hemos prevenido tener que curar”, mientras que no lleguemos a esa conclusión, la sanidad seguirá sin funcionar.
- Desde algunas instancias se ha alarmado a la población con la introducción de enfermedades con la llegada de inmigrantesNormalmente emigran los mejores, los más sanos, los más aptos, estas personas tienen una selección natural. No creo que deba ser un motivo de alarma.
- También se ha culpabilizado al emigrante de sobrecargar el gasto sanitarioEl gasto sanitario de los emigrantes en Canarias representa el 0.3% del dinero destinado a sanidad. Mientras que el emigrante repercute en el Producto Interior Bruto aproximadamente en un 4%. No es verdad, por tanto, que la emigración repercute produciendo una sobrecarga en la sanidad. Además los emigrantes usan muchísimo menos la sanidad que otras personas de la comunidad. Se da el caso curioso de que incluso los emigrantes en situación legal son cinco veces menos demandantes de sanidad que cualquier otro ciudadano.
- ¿Por qué existe una sanidad pública y no se ha socializado la farmacia?Esa pregunta me la he hecho en muchas ocasiones. No llego a entender por que los hospitales cuentan con un departamento de farmacia y no existe ese mismo departamento en los Centros de Salud. Pero claro, en el circuito comercial de los medicamentos las farmacias se llevan el 30% del coste del producto, el mayorista se lleva el 12% del coste del producto y el Estado destina a los laboratorios el 16% de los beneficios para que sean invertidos en la formación continuada de los médicos. De este modo, vemos como el 58% del precio de un medicamento va a parar a intermediarios. ¿Por qué un colectivo que no llega a mil personas en Canarias, como son los farmacéuticos, tiene esas prebendas? ¿Por qué no se pueden establecer farmacias unas al lado de otras? ¿Por qué este colectivo tiene la fuerza de imponer un sistema determinado de venta de productos? ¿Por qué no se establecen oficinas de farmacia en cada Centro de Salud? En estos momentos el paciente aporta el 40% del precio del medicamento, pues bien, si nos ahorráramos ese 58% de intermediación podríamos permitirnos el lujo de no cobrar un solo céntimo con lo que mejoraría además la financiación.- En un reciente informe sobre corrupción sanitaria el catedrático Manuel Villoria señalaba que las industrias farmacéuticas destinan entre un 25% y un 40% de sus recursos a promocionar sus productos e influir en las decisiones de los médicos. Hace algunos años se pretendió combatir sin éxito el hecho de que los laboratorios primaran a los médicos con inscripciones a congresos, regalos, viajes de vacaciones, bolsas de viajes, etc. Recientemente el director general de Farmacia del gobierno de Canarias justificaba esa práctica al corresponder a los laboratorios la formación continuada de los médicos. Pero de alguna manera esa relación sirve para controlar a los médicos, ya que los laboratorios invierten en los que recetan sus productos, por lo tanto aquellos otros que no recetan por razón de su condición, por ejemplo médicos de medicina preventiva, de determinada áreas de la cirugía, no cuentan con financiación para su formación al no ser rentables para los laboratorios. Y en esto no se ha parado a pensar la Administración. Que quede claro que no estoy proponiendo que los laboratorios tengan que prestarles ayuda sino que ese dinero, que la Administración le permite manejar a los laboratorios, debería ser gestionado por la propia Administración. Si la formación continuada pasa por manos de los laboratorios, de alguna manera los laboratorios ejercen una presión sobre los médicos a la hora de recetar.
- Ud. forma parte de un equipo de profesionales que recientemente ha presentado un Manifiesto por la Sanidad Pública Canaria ¿Cuáles son las líneas maestras de ese documento?La necesidad de nuevas inversiones; la introducción de cambios estructurales; la descentralización; la potenciación de las áreas primarias, de los centros de salud, hospitales y clínicas de primer y segundo nivel; la inclusión de la educación y prevención sanitaria en la enseñanza Primaria y Secundaria; el establecimiento de verdaderas políticas de recursos humanos; incentivar adecuadamente a los profesionales sanitarios; políticas de personal que conduzcan a que todos los trabajadores tanto del sector público como del sector privado, tengan los mismos derechos y obligaciones; establecimiento de programa de formación continuada; profesionalización de los gestores sanitarios, separando la responsabilidad política de la administrativa; delimitación del sector privado, con una política coherente de conciertos para evitar la descapitalización del sector publico y la financiación tecnológica encubierta de los centros privados y para garantizar la calidad de sus tratamientos; acreditación periódica de los centros y empresas privadas con los que el sector publico ha establecido conciertos, exigiéndoseles los mismos parámetros de calidad que al sector publico, etc.